martes. 19.03.2024

R.B. LINENSE-FC CARTAGENA: 2-0

RB LINENSE: Godino (1), Rafa Navarro (1), Rulo (2), Joe (2), Mario Gómez (2), Ismael Chico (1), Gato (2), Alfonso (1), Stoichkov (2), Sergio Molina (2) y Zamorano (2). Cambios: a los 77 minuto se va Gato y entra Mauri (-); a los 81’ se retira Zamorano y entra Ferrón (-); en el 83’ se marcha Stoichkov y entra Juampe (-).

FC CARTAGENA: Marcos (2), Óscar Ramírez (1), Jesús Álvaro (1), Míchel Zabaco (2), Ceballos (2), Gonzalo (1), Rivero (1), Llorente (1), Arturo (0), Cristo (1) e Isi Ros (2). Cambios: a los 40´se retira lesionado Cristo y entra Artiles (0); en el 50’ se marcha Gonzalo y entra Germán (0); en el 73’ Arturo es relevado por Renato (-) que debuta. GOLES: 1-0, min: 6: Stoichkov. 2-0, min. 47: Gato.

ÁRBITRO: Fernando Bueno Prieto (1).del comité de Madrid.  Tarjeta amarilla a los locales Alfonso, Chico y Mauri, y a los visitantes Gonzalo Verdú, Cristo Martín, Germán y Artiles.

INCIDENCIAS: 37 jornada de Liga de Segunda B, grupo IV. Campo municipal de La Línea de la Concepción, con unos 2.000 espectadores.

Tremendo. El Cartagena está groggy tras perder en La Línea de la Concepción un partido en el que se jugaba la vida. Encajaron en el minuto 6 el primer gol y fueron incapaces de reaccionar a lo largo y ancho de un encuentro penoso por parte cartagenerista, que parecía no jugarse nada. Lo peor es que los de Monteagudo, que ha perdido casi todo el crédito de la afición, fueron de mal a peor encajando  un segundo tanto en minuto 47 que acabó matando a un equipo que parece muerto y acabado. Tremendo, de verdad. En la imagen, cedida por el FCC, vemos a Zabaco intentando controlar un balón.

LA CRÓNICA por GUILLERMO JIMÉNEZ

Deprimente. Desconcertante. Decepcionante. La deriva del Cartagena apenas tiene parangón. Cuesta abajo, en caída libre como caballo desbocado. Tendrá que sacar fuerzas del fondo del saco, lavar la mente confusa y arreglar los desaguisados en la definitiva jornada al Recreativo de Huelva para agarrarse al clavo ardiendo de un playoff en el que ha estado desde la primera semana del campeonato.

La salida a La Línea de la Concepción fue un compendio de despropósitos hasta el punto que la Balona ganó con relativa comodidad, lo que estadísticamente es raro se dé. El conjunto de Monteagudo tuvo encefalograma plano, con leves atisbos de reacción que cortó la ordenada y contundente defensa de Julio Cobos. Ni un fallo en los despejes, por alto y por bajo. Tapando con el cemento armado de la anticipación. El Linense utilizó el arma del contragolpe y atizó muy pronto. Se sabía la lección. Al Cartagena le debió de pillar con el pie cambiado. El primer mazazo llegó con el gol del fusilero Zamorano.

En este tipo de encuentros donde hay tanto en juego ni siendo de acero puede resbalar el efecto de un 1-0 a los seis minutos frente a un adversario típico de Segunda B, con futbolistas de oficio: Chico, Zamorano, Sergio Molina y un Gato bastante más entonado en juego que el que estuvo en el Cartagena en la campaña de penurias que se salvó del descenso en Las Palmas, con Manuel Palomeque en el banquillo, con un pase del propio Gato al autor del gol del empate salvador. Y esta tarde de mayo siempre mes decisivo en las competiciones, en el estadio linense una galopada del lojeño puso el 2-0 que ya se podía intuir iba a ser imposible que el Cartagena lo remontase, a poco de arrancar el segundo tiempo.

Formación del Cartagena ante la Balona/FCC

Formación del Cartagena ante la Balona/FCC

DEMASIADO FÁCIL PARA LA BALONA

A la Balona, sin presión porque ya estaba libre de peligro, le salió un encuentro cómodo porque lo encauzó enseguida y la preocupación fue íntegramente del equipo que más se jugaba y que no se movió de acuerdo con los cánones en esta circunstancia. El 2-0 aun es marcador corto, con ser ya de por sí lacerante, pues el Linense tuvo balones diáfanos para golear, siempre por el recurso de las contras. El meta Marcos en la primera parte (34’) repelió un trallazo de Zamorano tal vez en la mejor parada del madrileño, y cinco minutos después se ‘rompió’ Cristo Martin, con un pinchazo muscular y entró en su puesto Artiles, sin resultado relevante. Tenía que ser Isi Ros el que llevase la manija atacante del equipo.

Demasiada responsabilidad. El Cartagena se movió durante demasiados minutos como ‘anestesiado’ o metido en una nube y sus intentos de reacción fueron muy tímidos. Isi Ros se afanó con su verticalidad y fue un islote a la hora de llevar algún peligro al área del meta Godino, y Arturo, más de lo mismo hasta que a Monteagudo se le encendió la bombilla y optó por relevarlo por el joven brasileño Renato Da Silva, del equipo de Preferente Autonómica, que tuvo pocos minutos para que se pueda analizar a fondo sus posibilidades. Salió desde luego el chico con el partido muy cuesta arriba. Un Everest. Porque todo le salió mal al conjunto favorito que dominó la Liga muchas semanas tal vez con excesiva prepotencia, pero que en La Línea acabó ‘bailado’ y castigado a jugárselas todas en la ronda 38. Óscar Ramírez pudo marcar en el minuto 89 y su tiro en el saque de una falta se estrelló en el palo del portal andaluz.

Ceballos

Ceballos controla un balón/FCC

QUERER Y NO PODER

El tiempo de prolongación fue un quiero y no puedo para los de la camiseta de la provincia marítima, en esta jornada en la que absurdamente no se jugó con el horario unificado,  que queda reservad para el domingo 14, puesto que al acabar el fiasco de La Línea los de Monteagudo no sabían si a final de campeonato podrían ser segundos, terceros o cuartos. Ver para creer.

Alfred Hitchcock no habría puesto tanta carga de suspense en esta película insólita.

Los jugadores de la Balona celebran el tanto de Stoichkov/Foto: RB LinenseLos jugadores de la Balona celebran el tanto de Stoichkov/Foto: RB Linense

Naufragio total del Cartagena (2-0)
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