El Plásticos Romero sufre un revés ante el Peñíscola que puede complicar sus sueños (2-4)

24 de marzo de 2018, 0:56

PLÁSTICOS ROMERO CARTAGENA-PEÑÍSCOLA REHABMEDIC: 2-4

CARTAGENA FS: Raúl, Jesús, Pelé, Drahovsky e Ique -cinco inicial- Attos, Juanpi, Rahali, Fernández y José Carlos.

PEÑÍSCOLA REHABMEDIC: Molina, Bagatini, Míchel, Terry y Orzaez -cinco inicial-, Carlinhos, Lucas Bolo, Esteban, Iván Rumbo y Iago Rodríguez

GOLES: 1-0 27' Drahovsky .1-1 28' R. Orzáez. 1-2 32' Iván Rumbo. 2-2 33' Ique 2-3 35' Esteban. 2-4 40' R. Orzáez

ÁRBITROS: Cordero Gallardo y Linares López. Tarjeta amartilla a Attos y Jesús, José Carlos y RAhali por los locales, y Bagatini y Michel por los visitantes.

INCIDENCIAS: Liga de Primera División de la LNFS, en el Pabellón Central de Deportes. La más floja entrada de la Liga al coincidir con el partido de la selección nacional de fútbol absoluta con la de Alemania, televisado, más el arranque de las procesiones de Semana Santa que suscitaba la atención de los ciudadanos.

Noche negativa para el Cartagena FS con el acierto bajo mínimos y la suerte dándole la espalda. / SPORTCARTAGENA

Tuvo este encuentro matices extraños para convertirlo en el tal vez más ‘loco’ de la Liga en la Bombonera, con una primera parte que nada tuvo que ver con la segunda. En ésta se concentraron los 6 goles de la noche y la suma de tres puntos para el Peñíscola, un equipo que llegó avisando que lo haría para ganar sin medias vueltas, yendo al grano, por lo directo, con Carlinhos de director de orquesta en la pista. Y así ese aviso de que llegaba el conjunto de la tierra del Papa Luna a vencer, lo llevó a la realidad con la complicidad de un Plásticos Romero, desvaído, desubicado, impreciso que perdió mucho tiempo en el primer tiempo creyendo que ganaría con poco esfuerzo y al tener que apretar no pasó de conseguir dos insuficientes goles, bien es verdad que extraordinarios goles de ejecución realizados por Juampi y Drahosvky. Pero fue como quemar la pólvora en salvas.

La reacción local no se prologó y quedó a mitad de camino. Ni chicha ni limoná.

Pero es que además el conjunto de Guillamón patinó demasiado. Errores al defender, encajando goles evitables y nada que hacer jugando de cinco con Jesús a 3 minutos para el final. Ya a la desesperada, lo que dio pie a que uno de los tantos castellonenses fuese a portería vacía.

TIROS A LA MADERA

Tampoco tuvo el Plásticos Romero una milésima de dosis de fortuna, con dos disparos casi consecutivos, potentes e impresionantes, que se estrellaron en la madera de la portería que defendía Molina cuando más apretaban los de casa, ya con el marcador en signo adverso y el partido muy cuesta arriba.

Casi nada le salió bien esta noche festiva, de decepción deportiva por este revés que es síntoma de exceso de confianza o relajamiento involuntario tras la gloria conquistada al vencer al Barcelona en el Palacio de Deportes en el preludio de la Copa de España frente a un Jaén que a la postre sería el campeón