Los peñistas del FC Cartagena, con aires renovados después de la elección de Miguel Ángel Muñoz como nuevo presidente, se presentaron en el ‘Artés Carrasco’ en un número considerable para dejarse escuchar. Pedro Cordero, jefe supremo en el club lorquino, les cedió todo el lateral al precio de 10 euros, y el detalle acabó notándose.
Al final la afición albinegra que se desplazó a tierras lorquinas disfrutaron de la remontada de su equipo, aunque no exento de sufrimiento. Su apoyo hasta el final fue también importante para los jugadores en un partido donde los jugadores del Cartagena tuvieron que ponerse el mono de trabajo en la segunda mitad para lograr los tres puntos.