Esto ya no es lo que era

Más y mejores fotos, más videos, mayor interactividad entre el diario y los lectores e incluso entre ellos mismos, nuevas secciones, mejor estructuradas y muchas cosas más que no vamos a enumerar aquí porque no es el objetivo de estas líneas y porque es mejor dejar que los lectores las vayan descubriendo por sí mismos.

El objetivo que sí que tienen estas letras es recordar y/o aclarar lo que sí somos. Es decir, aunque el continente ya no es lo que era, el contenido sigue siendo lo que siempre fue desde su inicio: un periódico.  ¿Y eso es necesario decirlo? Pues resulta que sí. Nosotros también lo creíamos innecesario antes, pero hemos comprobado que hace falta para algunos. Aunque pocos, afortunadamente.

En el entorno de un club, como en cualquier otro ámbito, todos tienen su función y todas son importantes, aunque diferentes: jugadores, entrenador, presidente, afición, prensa, etc. Incluso dentro del propio equipo, aunque lleven camisetas iguales, no hacen las mismas cosas los defensas que los delanteros, por ejemplo. Y cuando uno no sabe cuál es su lugar en el campo, llegan la confusión y las “disfunciones”, como diría Florentino Pérez.

Con la prensa, y aún más con la digital, ocurre algo parecido. Las páginas web que abundan en la red se parecen a veces entre sí, como las camisetas de los jugadores: tienen textos, tienen fotos, tienen videos, tienen colorines… pero no todas son periódicos. Y del mismo modo que los jugadores, cada uno debería saber cuál es su puesto en el campo para no confundirse y para no confundir a los demás. 

La misión de un grupo de aficionados, peñistas, supporters, tifossi, o como queramos llamar a quienes apoyan a su equipo incondicionalmente, con razón o sin ella -como dice el refrán- es ésa precisamente: apoyar, animar, aplaudir, alabar, halagar, ensalzar y engrandecer. Es una labor importante, vital e imprescindible. Ningún equipo del mundo podría sobrevivir sin una afición entregada.

Y la misión de la prensa, también importante, es otra y, a veces, menos agradable, tanto de ejercer como de recibir. Es la de informar, opinar, y criticar. Elogiando lo que cree acertado y reprobando lo que cree que está mal. Y, por supuesto, equivocándose ella misma a veces en sus críticas. Pero su obligación es criticar, libre e independientemente.

La apariencia externa, el continente, confunde a veces a algunos. Incluso a los propios protagonistas, los jugadores por ejemplo, que se preguntan por qué unos medios les apoyan siempre y otros no. Y la respuesta es fácil, porque unos son periódicos y otros no.

Nosotros también somos criticados. Es normal. Y es justo. Nadie está libre de ello. Lo hemos aceptado y lo aceptaremos con naturalidad. Sabemos que el viento sopla más fuerte cuanto más se eleva uno en la montaña. Y si fuimos los primeros y seguimos siéndolo será por algo.

Somos un medio libre e independiente. Y necesariamente plural, claro. Los que lo integramos no pensamos siempre del mismo modo y eso se refleja en nuestra tarea diaria. Malo sería que imperase aquí el pensamiento único; seríamos una secta más que un periódico.

Volviendo al principio, esto ya no es lo que era, pero… sigue siendo lo que era.  Lo hemos cambiado todo para que todo siga igual. Más fotos, más videos, más colorines, pero no solo fotos, no solo videos, no solo colorines, no solo elogios, no solo alabanzas. También crítica, sincera y constructiva. Aunque a veces duela. Y es que somos un periódico.
Somos…Sportcartagena.