Sagarduy, un jabato para la historia

¿Se puede saber lo que cobrabas en tu primera campaña en el Cartagena, en 1981-82?

“No mucho. Vine a hacer la mili en Marina y de paso jugué al fútbol”.

Dinos en dos palabras cómo era Gustavo Silva.

“Cómo diría yo…Nervioso, muy nervioso”.

¿Eres del Athletic?

“Sí…y también del Cartagena”.

¿Por qué Sagarduy no es con i latina?

“No lo sé. En mi DNI va con y griega, pero en el permiso de conducir está escrito con i latina” (y lo muestra)..

¿Aún te adeudan dinero por el fútbol?

“Luis Oliver me dejó a deber  siete meses de sueldo”.

¿ Por qué no has llegado a jugar en Primera?

 “Pude hacerlo cuando estuve en el Salamanca, pero tiraba más Cartagena y también la novia, y regresé”.

¿Qué nos dices de Florentino Manzano?

“Puso  mucho por el Cartagena y por el Cartagonova, pero no tuvo suerte, no le salieron bien las cosas”.

¿Te has vendido en algún partido o te lo han propuesto?

“No, nunca”.

¿Cuántas veces te han expulsado de un campo de juego?

“Una sola vez; fue en un partido en el Almarjal contra el Algeciras. Ganamos por 3-0. Recuerdo que le di un puñetazo a un jugador contrario”

¿Cristiano Ronaldo o Messi?

“Messi”.

¿Has jugado en San Mamés como visitante?

Sí; en la Copa del Rey, en una eliminatoria terminamos ganando por 0-1 el partido, había empate en el global y en la prórroga nos ganó el Athletic”.

Elige. ¿La Liga Adelante de ahora o la Segunda A de los años 80?

“Me gusta más la Liga de ahora. Hay más animación, más televisión. Los aficionados siguen las competiciones con más interés”

¿Txutxi Aranguren te enseñó mucho, poco o bastante?

“Me enseñó mucho y además era y es una muy buena persona”.

¿Fútbol sala o fútbol-11?

“Fútbol 11, aunque también estoy metido en el fútbol sala”.

¿El euro o la peseta?

“La peseta, desde luego”.

¿Devuelves o te devuelve dinero la Agencia Tributaria (Hacienda)?

“A mí me devuelven, pero pocas perras”.

¿Qué tal José Luis Belda?

“Fenomenal. Se preocupó del equipo, como presidente, y de los jugadores”.

¿Franco o Zapatero?

“De eso…mejor no opino”.

¿Mauri o Maguregui?

“Arteaga, mi compañero de equipo, me hablaba muy bien de Mauri; a Maguregui yo lo conocía porque entrenó al Murcia”.

Siendo jugador, ¿cuántas noches dormiste  en el Cuartel haciendo la mili?

“Desde luego, pocas. Estaba ‘enchufado’ por ser jugador de fútbol”.

¿Tu mejor contrato profesional?

“Cuando firmé en el Orihuela”.

¿Te has encerrado alguna vez, para protestar, con tu equipo?

“Un par de veces nos encerramos en el Almarjal, por el tema económico, en la época del presidente Andrés Martínez”.

¿Quién comenzó a llamarte ‘Jabato’?

“Me nombraba así el periodista Pepe Navarro”. En realidad creo que fue cosa de Jaime Cros.

¿Cómo es Perico Arango?

“Es un fenómeno total”.

Y, ¿qué tal tipo era  el presidente Andrés Martínez Prieto?

“Le gustaban las cosas claras y era muy serio. Además se preocupaba mucho por el club”.

¿Recuerdas cómo se llamaba el cura que te casó?

“Pues…no, la verdad es que no. Sí sé que me casé hace 26 años y que fue en la iglesia de la Caridad”.

¿Qué echas de menos del País Vasco?

“El frío. Allí es frío de verdad. Cuando voy por Navidad lo recuerdo. También echo en falta de mi tierra los familiares”.

¿Has matado alguna vez una mosca?

“Alguna vez sí”.

¿Tienes algún hijo que vaya para futbolista?

“No y por una razón:  el chiquillo lo tuvo que dejar por culpa del asma”.

¿Escuchas el 107.9 de la Frecuencia  Modulada, Sportcartagena en Radio Unión?

“Perfectamente, desde el  primer día. Escuché el partido de Huelva. Y el periódico digital también lo miro todos los días”.

¿Lees El Correo o El Egin?

“Cuando voy a Bilbao con la familia siempre leo El Correo”.

¿Tu coche cuesta menos de 24.000 euros?

“¡Claro! Mucho menos de 24.000 euros…”

Del 0 al 10 puntúa a Genaro Zapata ‘El Brujo’, el primer Premio Sportcartagena?

“Yo le pongo un 11. Para mí es un honor ir tras él y ser el número dos en este homenaje de Sportcartagena”-

Un día atravesó la península en tren de norte a sur para acercarse a esta parte del Mediterráneo. Vino  pensando en apenas unos meses –año y medio- pero se quedó para siempre. Llegaba desde su Erandio natal con el petate en 1981 y en un reemplazo que lo mandó directo, de cabeza, al cuartel del tercio de Levante en La Algameca. Vino para hacer la ‘mili’ en la Infantería de Marina cuando la ciudad hoy portuaria y turística 100% aún era una referencia en lo militar y marinero de España y vino junto a Arteaga, otro bravo zurdo vasco del entonces llamado Bilbao Athlétic, que acabaría cedido en aquel Efesé que, dirigido por el mesiánico Gustavo Silva, acabó ascendiendo a Segunda A en Torrejón. Alejandro Sagarduy formó parte de aquel once para la historia. Aún hoy lo recuerda y se le eriza el bello cada vez que lo hace.

Al poco de llegar al Cartagena y como siempre se estaba riendo –en realidad se sigue riendo con todo- un día lo cogió Perico Arango, entonces el icono más importante que tenía el equipo y le preguntó: -Oye tú, dime la verdad ¿es que cuando estabas en la cuna te tragaste un payaso o qué?-

Tuvo que quedarse de piedra cuando escuchase aquellas palabras. Pero fue lo mismo que le volvió a repetir los otros días cuando estuvimos en el Cartagonova para preparar este reportaje con los dos mismos protagonistas, Pedro Arango hoy ‘segundo’ del actual entrenador del Cartagena. Alejandro Sagarduy, la risa personificada en este vasco de pura cepa pero que también se siente muy orgulloso cuando marcha a su tierra de vacaciones y le llaman ‘cartagenero’. Algo de razón sí que llevan.

El ‘vasco’, su otro apelativo, no para. Desde que colgó las botas trabaja como funcionario en el Pabellón Central y es el utillero del Reale Cartagena desde que Pepe Nicolás se marchó a vivir a Brasil. Una doble función que desempeña rodeado del cariño de sus compañeros, que le quieren más que a las pesetas, nos decía uno de ellos. “Mira si habrá ‘vascos’ en España pero cuando decimos ‘ahí está el vasco’ ya sabemos que hablamos de Alejandro.

Lo del seudónimo con el que pasó a la historia ‘Jabato’ se lo puso una tarde en la que Jaime Cros, conocido locutor de la época y de los mejores que hemos tenido en Cartagena, lo bautizó así. Los otros días hablábamos con Jaime para recordar ése ‘bautizo’ que fue durante un partido que se transmitía a través de una entonces incipiente Radio Cartagena Ser. Aquella tarde Sagarduy lo estaba haciendo tan sumamente bien que a Jaime Cros se le debieron de acabar todos los adjetivos hasta que se le ocurrió lo de ‘Jabato’, y desde entonces así le conocemos, todo un ‘Jabato’.

Sagarduy colgó las botas en Cartagena en una fría noche de enero en el estadio Cartagonova y  ante uno de los mejores equipos del mundo, el Bayer Munich. Fue como un regalo que le hizo Florentino Manzano, fundador de aquel Cartagonova (el actual FC Cartagena), que aprovechó la visita del equipo alemán durante un ‘stage’ a La Manga Club y lo convenció para disputar un amistoso, hace de aquello más de una década.

Fue aquel un bonito amistoso que acabó 1-1 y porque los bávaros empataron cerca del final que si no se habría retirado ganándole al mismísimo Bayer Munich. Aún aquella noche brilló con luz propia. ‘Secó’ por completo a Mathhaus, entonces el ‘10’ del Bayern y el capitán de la Selección de Alemania y dio todo un repertorio de cómo había que jugar al fútbol, como un centrocampista valiente, capaz de erigirse el mejor entre los mejores futbolistas de Europa. De hecho Delibasevic, aquel serbio que jugaba de extremo, se marchó lesionado y también aburrido del placaje que le hizo el vasco. Ninguno de sus hijos le ha salido deportista. Han prevalecido los estudios sobre lo demás porque, además, son muy buenos estudiantes de lo que el ‘vasco’ se siente, si cabe, más satisfecho que si hubieran vivido del deporte. Él ni se atreve a pensar en qué cifra debería de haber cobrado si hoy en día formase parte de la plantilla de este Cartagena que lucha en Segunda. Tampoco recuerda bien cuantas temporadas exactas jugó en el Cartagena “14 ó 15 por lo menos”.

El dato es lo de menos, lo que importa es lo que vivió y de los hombres inolvidables con los que hizo un vínculo inolvidable como el Críspulo o Vizcaíno, a los que quería con locura. Eran los dos utilleros de entonces, a la vieja usanza. Crispulo en realidad se llamaba Antonio y también le llamaban Cirilo, era el padre del meta Sebastián y tenía unas manos gigantescas. El que se metía con él vasco’ ya sabe que le esperaba una monumental bronca, con palmetazo incluido en la espalda, la popular ‘puya’ si hacía falta, del Críspalo. Hasta ese punto le querían.

Los otros días le preguntamos si tuvo oportunidad de jugaren Primera. Y la tuvo. Fichó por el Salamanca estando en Primera pero era novio de Mari Carmen, la que es su esposa desde hace más de un cuarto de siglo. Y pudo más el amor que el balón. Estando en salamanca pensaba más en el Cartagena, entonces en Segunda, pidió la baja y regresó a la que, desde entonces es su hogar, en el castizo barrio cartagenero de Vistalegre donde le quieren como a uno más. El día del ascenso en Torrejón pasó una de las noches más felices de su vida. Esa noche se dignó en beber un poquito de champán en el hotel Intercontinental, en la madrileña calle Carretas, y se río mucho al coincidir con un viaje de estudios de un colegio femenino de Benidorm. Aquella noche encerraron a Críspulo en un armario y él, junto al Vizca, fue uno de los que corrió en su auxilio para salvarle y abrirle.

Lo cobró todo en el Cartagena. Menos mal. El ‘pico’ que le debían acabó pagándoselo el hoy dueño del club Paco Gómez. Un ‘jabato’ hasta en eso pero aquellos fueron tiempos malos, muy malos. Los vivió muy de cerca junto a Paco Sánchez viajando a la AFE, a Madrid, casi todas las semanas, para defender el pan de sus compañeros en aquella etapa convulsa de un Efesé que poco después acabaría desapareciendo.