jueves. 28.03.2024

El deporte juega un papel fundamental en el correcto desarrollo de los más pequeños. Aunque el fútbol es uno de los deportes más populares, especialmente para los niños, no es la única opción a tener en cuenta cuando se trata de encontrar el deporte que mejor se adapte a los gustos de cada pequeño. 

En este artículo repasaremos cinco deportes con grandes beneficios para que los pequeños de la casa tengan donde elegir:

Ciclismo

El ciclismo es un gran deporte ya que promueve la actividad física a la vez que invita a explorar el mundo natural. A nivel físico, el ciclismo mejora la salud cardiorrespiratoria, la capacidad muscular, la coordinación y el equilibrio. 

A nivel psicológico también tiene muchas ventajas. En primer lugar, el ciclismo es un deporte que por lo general se practica en grupo, de forma que ayuda a promover una sensación de comunidad y sentimientos de logro compartido una vez que se termina una ruta. Esto puede tener un impacto muy positivo en la salud social del niño en cuestión. 

Además, como hemos comentado, el ciclismo es la oportunidad perfecta para pasar más tiempo en la naturaleza; esto tiene innumerables beneficios, ya que se ha demostrado que la gente que pasa más tiempo en el medio natural tiene niveles más bajos de estrés y es más feliz. 

Además, tener una bicicleta propia es una gran oportunidad para enseñarles a los más pequeños a responsabilizarse de sus cosas. La bicicleta puede convertirse en su responsabilidad, algo que tienen que mantener en buenas condiciones si quieren seguir practicando el deporte. Incluso es una buena oportunidad para que aprendan del uso de ciertas herramientas, como por ejemplo las llaves dinamométricas o los destornilladores, comúnmente usados para mantener las bicicletas en perfecto estado. De esta forma también empezarán pronto a desenvolverse con utensilios manuales, lo que a su vez es una buena forma de acelerar su desarrollo motriz. 

La natación

La natación es un deporte excelente que ofrece multitud de beneficios mentales y físicos. Nadar es un ejercicio de cuerpo completo que promueve la salud cardiovascular, la flexibilidad y también la capacidad pulmonar y muscular. Además, la natación tiene el beneficio añadido de que es un deporte de bajo impacto – ya que se practica en el agua – por lo que es perfecta para aquellos niños con hiperlaxitud o problemas de articulaciones. 

Además de los beneficios físicos, la natación también puede ser una gran aliada de la salud mental de los más pequeños. Al ser un deporte que se practica en grupo, es una gran forma de hacer amigos y mejorar la salud social de los niños más tímidos. 

Además, la natación es un deporte donde se aprende rápido; esto puede aumentar la confianza de aquellos que lo practiquen, mejorando así la seguridad en si mismos en otros ámbitos de la vida. 

Balonmano

El balonmano es un deporte en equipo que combina elementos de otras disciplinas deportivas, como baloncesto, fútbol y hockey. Puede ser perfecto para aquellos niños o adolescentes que ya hayan probado más deportes pero que aún no hayan encontrado aquel que mejor se adapta a ellos. 

En cuanto a los beneficios físicos, el balonmano también mejora la salud cardiovascular a la vez que refuerza los reflejos, la coordinación y sobre todo la rapidez de los jugadores. 

Además, el balonmano es un deporte donde el trabajo en equipo es fundamental. Los jugadores necesitan una estrategia común y muy buena comunicación para ganar cualquier partido. De esta forma, los niños o adolescentes que lo practiquen podrán disfrutar de una sensación de satisfacción colectiva cada vez que ganen, con los consecuentes beneficios psicológicos. 

Otro beneficio a nivel psicológico es la mejora en la capacidad para trabajar bajo presión en determinadas situaciones. El balonmano es un deporte extremadamente dinámico, en el que muchas de las decisiones tienen que tomarse en una milésima de segundo y bajo gran presión. A la larga, esta toma de decisiones en situaciones de estrés acaba ayudando a desarrollar una resiliencia magnífica. 

Artes marciales

Las artes marciales, como al jarate o el judo, son la mezcla perfecta entre ejercicio y disciplina. Los niños que las practican mejoran habilidades como la coordinación o el equilibrio, a la vez que aprenden a defenderse a si mismos. 

Además de los ya mencionados beneficios físicos, las artes marciales son las perfectas profesoras de disciplina. También enseñan a concentrarse y a desarrollar resiliencia, habilidades que a la larga mejoran el bienestar de las personas. 

Yoga 

Aunque el yoga no se suele considerar un deporte de niños, lo cierto es que es una muy buena forma de ejercitarse para los más pequeños. Practicar yoga mejora la flexibilidad y la fuerza física, y es perfecto para aquellos niños que tengan problemas posturales o de espalda (siempre ayudados de un profesional).

Además, el yoga también tiene beneficios psicológicos ya que promueve la relajación, liberando al que lo practica de los sentimientos de estrés. Por último, el yoga mejora la concentración y el control corporal de aquel que lo practica, haciendo así que sea un ejercicio altamente beneficioso a nivel mental. 

Y hasta aquí los cinco deportes que pueden suponer una gran oportunidad de crecimiento para los más pequeños. Todos estos deportes tienen beneficios a nivel físico intrínsecos a cualquier tipo de movimiento. Además, todos tienen también diferentes beneficios psicológicos que a la larga ayudarán al desarrollo vital del niño o niña en cuestión. 

Más allá del fútbol: 5 deportes perfectos para los más pequeños
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