20 de noviembre de 2011, 22:26
El Almería terminó el partido entre pitos, pero no hacia el árbitros, sino hacia los jugadores y el entrenador. Sin embargo, éste último, Lucas Alcaraz, se quejó después en sala de prensa de la actuación arbitral.
Sobre todo, centraba sus quejas en dos penaltis no señalados, ambos por manos dentro del área de los defensores cartageneristas: "no nos han pitado dos penaltis clamorosos. En uno de ellos, el primero, es que ni siquiera había aglomeración de jugadores y el árbitro lo ve claramente. Nos estamos acostumbrando a que les cueste más a los árbitros pitarnos a favor que en contra", decía el técnico andaluz.
También comentó que se añadieron sólo dos minutos al final, cuando se habían realizado los seis cambios: "en mi trayectoria profesional, es la primera vez que con 0-0 y con los seis cambios hechos el árbitro sólo da dos minutos de prolongación".
