El Cartagena necesita ganar en Anduva para volver a respirar y hacer un paréntesis con esas dos derrotas consecutivas ante rivales directos como pueden ser el Logroñés y el Castellón. A los dos los ha reactivado el Efesé y ahora le toca a él mismo ponerse las pilas en un terreno donde solamente ha ganado en lo que va de Liga la Ponferradina (0-1).
El Real Zaragoza, con su pésima marcha hasta la fecha, y el Sporting, cayeron en Anduva donde el Mallorca –que lo tendremos la próxima semana por el Cartagonova- no logró pasar de un raquítico empate y eso que los insulares son el único equipo que, de momento, aguanta la marcha imparable del Espanyol.
Tras el fracaso de Castellón es prácticamente seguro que Borja Jiménez introduzca variaciones en el once inicial blanquinegro
Solo es una pequeña muestra de lo que espera en un estadio que siempre se ha caracterizado por sus dificultades. Borja lo sabe bien y es fácil pensar que, visto lo que ocurrió en Castellón después de toquetear las líneas –Sergio Lozano titular en detrimento de Elady- parece fácil pensar en el regreso del goleador jiennense al once inicial. Rubén Castro estuvo demasiado sólo y seguro que echaría en falta a su socio en la delantera con el que parece haber conectado a las mil maravillas.
Y es que en esta Liga no hay lugar ni para la tregua ni para el respiro. Todo va demasiado rápido y no hay tiempo ni para recuperar. En octubre todo fue a pedir de boca con 14 puntos sobre 15 pero es que ha llegado noviembre y a estas alturas el Efesé no ha conseguido un punto todavía. Además del Mirandés, en la puerta esperan haciendo cola ya esperan el Mallorca, el Rayo Vallecano, el Espanyol y el Málaga. Casi nada. Los futbolistas albinegros, con Borja al frente, saben que hay que reconducir la situación lo más rápidamente posible para evitar problemas.
Los mirandeses solo han perdido un partido en casa, ante la Ponferradina (0-1) pero Zaragoza y Sporting caueron allí y el Mallorca no pasó del empate
El Mirandés, que perdía 2-1 el pasado sábado en Almería, ha jugado seis partidos en Anduva y salvo la derrota ante la ‘Ponfe’ el resto los ha sacado con bastante decoro. Por eso va a ser una dura prueba que, si el Cartagena consigue pasarla, dará un buen paso hacia una tranquilidad efímera, a la espera de lo que se le viene encima.
Es cierto que nadie se ha rasgado las vestiduras en el seno del club pero Borja tiene la presión de esas dos derrotas que, seguramente, no mereció el equipo albinegro pero que al final son lo que son, dos tropiezos serios que hay que enmendarlos lo más rápido posible. Y la forma más segura de hacerlo es dar un golpe en el fortín del Mirandés para volver un poco a la tranquilidad de las últimas semanas.