Ais Reig, el árbitro alcoyano que se ha ganado a pulso fama de 'casero', no defraudó a quienes así piensan. Influyó claramente en el marcador con sólo dos decisiones puntuales, la falta clara de Rosales en la jugada previa del 2-0 por derribo clarísimo sobre Nacho Gil en la banda y el claro penalti sobre Simón Moreno, que fue zancadilleado dentro del área pero el colegiado ni quiso señalar nada ni tampoco consultarlo con el VAR. por lo demás no tuvo más incidencias pero esas fueron suficientes
Ais Reig el colegiado del encuentro, volvió a demostrar su condición de árbitro casero como ya hiciera en el Espanyol-Albacete de la primera jornada. Esta vez sus mayores fallos fueron dos, pero decisivos, la clara falta de Rosales sobre Nacho Gil en la jugada previa al 2-0 derribando el venezolano al cartagenerista en la banda y permitiendo que Rosales se marchara con el balón y después en el descarado penalti de que fue objeto Simón Moreno casi al final.
El colegiado, que mostró un total de seis cartulinas amarillas, cuatro para el conjunto local (Perea, Rubén Pérez, Sabin Moreno y Borja Bastón) mientras que dos se las mostró al conjunto portuario (Uri y Elady). El encuentro supo llevarlo bien por lo demás, sin que se 'desmadrasen' ambos conjuntos que a través de sus bazas querían imponer el dominio completo en todos los aspectos del juego.
Su segundo error también fue clamororo en el penalti no señalado a Simón Moreno al final de los segundos cuarenta y cinco minutos, pena máxima que tampoco decidió revisar el VAR y que molestó al banquillo cartagenerista y que podría haber supuesto recortar mas distancias en el marcador. Solo por estos dos fallos garrafales y por no molestarse siquiera en consultar el VAR este vecino de El Muro de Alcoy se quedó bastante lejos del aprobado, si tenemos en cuenta estas dos faltas que él vio claramente pero que prefirió perjudicar al más modesto. Lo de siempre.
