El nuevo libro sobre el FC Cartagena y sus historias, escrito y diseñado por Paco Manzano y Javier Albaladejo, avanza hacía su presentación. Se ha previsto para finales de abril y habrá presencia municipal. En ese sentido el municipio se ha comprometido a comprar ejemplares para el Ayuntamiento y a acompañarlos en la presentación del libro, cediendo para ello un espacio municipal.
Os dejamos el texto de la última reseña e ilustración "Los otros". En ella se habla de Angel, un personaje de nuestro barrio, del "Abute" y de "El Papu" que, junto a otros personajes constituyen la otra historia del Cartagena.
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LOS OTROS
En el mundo del fútbol hay muchos personajes que forman parte de la otra historia de este deporte. Son personas a los que la vida ha tratado mal o que no tuvieron suerte en el reparto de facultades en el momento de su nacimiento.
Por ejemplo, en mi barrio teníamos a Ángel, un señor sin pelo que llevaba siempre en su bolsillo unas tarjetas y que buscaba constantemente un encuentro que arbitrar. Cuando le dejábamos que hiciera de juez en uno de nuestros partidos casi siempre terminaba sacándome tarjeta. Yo, entre bromas y veras, hacía como que protestaba y entonces él se ponía muy serio y me decía “Siga jugando”. En ese momento Ángel se sentía importante y pocas veces he visto a una persona más feliz. Sin embargo, había otros niños que le hacían rabiar, preguntándole dónde se había dejado el peine y Ángel corría tras ellos acordándose de toda su familia.
Unos años antes, existió otro personaje en el Lago. Se llamaba Claudio Sánchez Gallego, pero todos le conocían por “el Abute ”. Este señor siempre iba vestido con la camiseta del Cartagena e iba acompañado de su perrita Linda. En los partidos del Almarjal, y gracias al permiso del Delegado de campo, saltaba al césped durante los descansos para amenizar a la grada con sus lanzamientos de penalti.
En nuestros días tenemos a El Papu, antiguo utillero de nuestro equipo que ha terminado ganándose la vida de gorrilla en el parking del Cartagonova. Vive en una casa abandonada, sin luz , ni agua ni casi ventanas y en las noches de frío invierno tiene que luchar contra la humedad de nuestro clima con las pocas mantas que ha podido conservar. Su despacho de trabajo es la explanada del Cartagonova y allí se encuentra todos los días a jugadores, entrenadores y directivos. Casi siempre habla bien de todos pero cada año hace referencia a unos cuantos jugadores que se portan especialmente bien.
Estos tres personajes son solo un ejemplo. Seguro que hay muchos más en nuestro equipo y en nuestra ciudad. Lo que nunca cambia es que las buenas personas jamás les faltan el respeto y siempre tratan de ayudarlos.
El otro día mi pequeño recibió un regalo de una compañera. Era un muñeco de papel, con forma de rana, que al abrirse ofrecía una lista desplegable con frases en las que la niña había escrito unos mensajes dedicados a Javier. “El mejor amigo del mundo”, “You are my sunshine”, “Siempre ayudas a los demás, no te importa quién sea, y jamás te ríes de nadie”.
Cualquier padre puede imaginar el orgullo que sentí. Y más aún cuando le dije a mi hijo lo contento que estaba y el niño se quitó importancia. Y de todos los mensajes, sin duda, el que más me alegró fue el último. Porque las historias se repiten y estoy seguro que él también hubiera fingido enfado después de recibir una tarjeta de Ángel.
