20 de diciembre de 2009, 1:00
FICHA TÉCNICA
RESULTADO
LEVANTE UD:
Manu Herrera (1); Pau Cendrós (1), Ballesteros (1), Serra (2) Ángel (2); Gorka Larrea (1), Iborra (2) (Xisco Muñoz (1), 59),(Cendrós (81) s.c.) Miguel Pérez (2) (Marc Mateu (59) 1), Rubén Suárez (2), Javi Guerra (2), Juanlu (1).
FC CARTAGENA:
Rubén (2), Expósito (2), Txiki (2), Pablo Ruiz (2), Clavero (2); Mariano Sánchez (2), Antonio Longás (2); Lafuente (2) (Tonino (1) 90), Falcón (2) (Víctor (1), 72), Tato (2) (Héctor (89) s.c.),Toché (2)
ÁRBITRO:
José Luís Lesma López (madrileño). Tarjetas para los azulgranas Serra (22), Javi Guerra (66) y Ángel Sánchez (72). En los cartageneristas la vieron Lafuente (20), Longás (69), Expòsito (69), Tonino (83), Víctor (83) y Héctor (89).
GOLES:
0-1. Min. 44: Zapatazo directo de Toché desde unos 25 metros, en falta directa.
0-2. Min. 58: Otra falta directa aunque ahora escorada hacía el ángulo izquierdo cartagenerista que lanza Expósito por sorpresa mandando el balón a la red.
1-2. Min.80. Rubén, en fuera de juego, se aprovecha de un balón que toca en un jugador albinegro y desde fuera del área marca en vaselina.
INCIDENCIAS:
Jornada 17 en la Liga Adelante. Muy poco público, apenas 3.400 aficionados según los datos oficiales y de los que unos 200 eran seguidores cartageneristas, que se dejaron escuchar en todo momento.
LA CRÓNICA
Por MANUEL ÁNGEL
Todo vuelve a su sitio y el Cartagena, al menos esta noche, dormirá de nuevo en puestos de ascenso a la espera de lo que ocurra en el Real Sociedad-Betis de la matinal dominical, donde los sevillanos necesitarían ganar para mantener su tercera plaza. Pase lo que pase a los cartageneristas nadie les va a quitar las buenas sensaciones vividas en el antiguo Vallejo levantinista donde ha vuelto por sus fueros lejos de casa. El Cartagena sonríe de nuevo y su afición también.
Si algo tenía claro y casi le obsesionaba a Juan Ignacio era cortar, como él mismo decía, la ‘hemorragia’ de goles por las que el Cartagena parecía desangrarse. Sabía él y sabíamos muchos que iban a producirse cambios, ajustes defensivos si los queremos llamar así. La defensa, efectivamente, fue la misma que ante el Salamanca pero con el añadido de Mariano Sánchez merodeando por los alrededores mientras Miguel Falcón cogía galones para ayudar a la construcción del juego ofensivo y servir balones a la contra tanto a Toché como a Tato, que era la gran novedad.
Víctor y De Lucas se quedaron en el banquillo y nunca sabremos si por castigo o porque, simplemente, había que buscar otras alternativas para correr y correr mucho, para defender desde la delantera y para no dar un balón por perdido. Una pequeña revolución que funcionó. Cuando se gana todo funciona pero nadie puede negar que era, que ha sido una apuesta arriesgada de JIM, que sabía todo lo que había en juego.
Pero vayamos por partes. La primera hora de partido ha sido lo mejor de un Cartagena que marcó tres goles, tres golazos, pero sólo valieron dos. Porque el de Miguelito Falcón fue un gol como una catedral en el minuto 40. ¿Os acordáis –los que lo vieráis- de aquel que marcaba Michel en el Mundial de México 86 ante Brasil? Pues fue lo más parecido pero ni el auxiliar ni el árbitro lo vieron. Pero gol fue. Y el más bonito además.
Aquello fue el aviso. Dos minutos más tarde Lafuente enviaba otro disparo con márchamo de gol, no lo fue de milagro, pero era otro aviso. Y al fin aparecía Toché que, desde unos 30 metros, sorprendía a propios y extraños con una falta directa que la clavó en la red. Era el premio al mejor juego de un Cartagena que, sin maracas ni filigranas pero hacía lo que había que hacer.
UNA SEGUNDA PARTE DISTINTA
En la segunda parte todo se mantuvo como estaba, con un Cartagena sabiendo contener y un Levante que quería pero no podía. Así hasta que, en el minuto 13, se produce una falta al borde del área y aparece Expósito por sorpresa para colocar la pelota en el fondo del marco levantinista. Era el 0-2 y daba la impresión de que podía ser el definitivo tal y como iba el partido. Pero aún quedaba por delante más de media hora.
Algo tenía que hacer el Levante y puso toda la carne en el asador, sacó a la artillería que tenía en el banquillo y a partir de ahí ya era, empezaba a ser otro partido, con un Cartagena apostando por lo que ya tenía en la mano que por seguir incrementando la cuenta. Y así llegaría el 1-2, obra de Rubén en una jugada que era fuera de juego pero que se quedó a la interpretación del árbitro porque el balón venía rebotado por un blanquinegro.
Los últimos minutos fueron de sufrimiento total con un Cartagena muy seguro de lo que hacía y con mucho sufrimiento en el tiempo añadido pero al final, los blanquinegros y su afición vuelven a sonreir.
RESULTADO
LEVANTE UD:
Manu Herrera (1); Pau Cendrós (1), Ballesteros (1), Serra (2) Ángel (2); Gorka Larrea (1), Iborra (2) (Xisco Muñoz (1), 59),(Cendrós (81) s.c.) Miguel Pérez (2) (Marc Mateu (59) 1), Rubén Suárez (2), Javi Guerra (2), Juanlu (1).
FC CARTAGENA:
Rubén (2), Expósito (2), Txiki (2), Pablo Ruiz (2), Clavero (2); Mariano Sánchez (2), Antonio Longás (2); Lafuente (2) (Tonino (1) 90), Falcón (2) (Víctor (1), 72), Tato (2) (Héctor (89) s.c.),Toché (2)
ÁRBITRO:
José Luís Lesma López (madrileño). Tarjetas para los azulgranas Serra (22), Javi Guerra (66) y Ángel Sánchez (72). En los cartageneristas la vieron Lafuente (20), Longás (69), Expòsito (69), Tonino (83), Víctor (83) y Héctor (89).
GOLES:
0-1. Min. 44: Zapatazo directo de Toché desde unos 25 metros, en falta directa.
0-2. Min. 58: Otra falta directa aunque ahora escorada hacía el ángulo izquierdo cartagenerista que lanza Expósito por sorpresa mandando el balón a la red.
1-2. Min.80. Rubén, en fuera de juego, se aprovecha de un balón que toca en un jugador albinegro y desde fuera del área marca en vaselina.
INCIDENCIAS:
Jornada 17 en la Liga Adelante. Muy poco público, apenas 3.400 aficionados según los datos oficiales y de los que unos 200 eran seguidores cartageneristas, que se dejaron escuchar en todo momento.
LA CRÓNICA
Por MANUEL ÁNGEL
Todo vuelve a su sitio y el Cartagena, al menos esta noche, dormirá de nuevo en puestos de ascenso a la espera de lo que ocurra en el Real Sociedad-Betis de la matinal dominical, donde los sevillanos necesitarían ganar para mantener su tercera plaza. Pase lo que pase a los cartageneristas nadie les va a quitar las buenas sensaciones vividas en el antiguo Vallejo levantinista donde ha vuelto por sus fueros lejos de casa. El Cartagena sonríe de nuevo y su afición también.
Si algo tenía claro y casi le obsesionaba a Juan Ignacio era cortar, como él mismo decía, la ‘hemorragia’ de goles por las que el Cartagena parecía desangrarse. Sabía él y sabíamos muchos que iban a producirse cambios, ajustes defensivos si los queremos llamar así. La defensa, efectivamente, fue la misma que ante el Salamanca pero con el añadido de Mariano Sánchez merodeando por los alrededores mientras Miguel Falcón cogía galones para ayudar a la construcción del juego ofensivo y servir balones a la contra tanto a Toché como a Tato, que era la gran novedad.
Víctor y De Lucas se quedaron en el banquillo y nunca sabremos si por castigo o porque, simplemente, había que buscar otras alternativas para correr y correr mucho, para defender desde la delantera y para no dar un balón por perdido. Una pequeña revolución que funcionó. Cuando se gana todo funciona pero nadie puede negar que era, que ha sido una apuesta arriesgada de JIM, que sabía todo lo que había en juego.
Pero vayamos por partes. La primera hora de partido ha sido lo mejor de un Cartagena que marcó tres goles, tres golazos, pero sólo valieron dos. Porque el de Miguelito Falcón fue un gol como una catedral en el minuto 40. ¿Os acordáis –los que lo vieráis- de aquel que marcaba Michel en el Mundial de México 86 ante Brasil? Pues fue lo más parecido pero ni el auxiliar ni el árbitro lo vieron. Pero gol fue. Y el más bonito además.
Aquello fue el aviso. Dos minutos más tarde Lafuente enviaba otro disparo con márchamo de gol, no lo fue de milagro, pero era otro aviso. Y al fin aparecía Toché que, desde unos 30 metros, sorprendía a propios y extraños con una falta directa que la clavó en la red. Era el premio al mejor juego de un Cartagena que, sin maracas ni filigranas pero hacía lo que había que hacer.
UNA SEGUNDA PARTE DISTINTA
En la segunda parte todo se mantuvo como estaba, con un Cartagena sabiendo contener y un Levante que quería pero no podía. Así hasta que, en el minuto 13, se produce una falta al borde del área y aparece Expósito por sorpresa para colocar la pelota en el fondo del marco levantinista. Era el 0-2 y daba la impresión de que podía ser el definitivo tal y como iba el partido. Pero aún quedaba por delante más de media hora.
Algo tenía que hacer el Levante y puso toda la carne en el asador, sacó a la artillería que tenía en el banquillo y a partir de ahí ya era, empezaba a ser otro partido, con un Cartagena apostando por lo que ya tenía en la mano que por seguir incrementando la cuenta. Y así llegaría el 1-2, obra de Rubén en una jugada que era fuera de juego pero que se quedó a la interpretación del árbitro porque el balón venía rebotado por un blanquinegro.
Los últimos minutos fueron de sufrimiento total con un Cartagena muy seguro de lo que hacía y con mucho sufrimiento en el tiempo añadido pero al final, los blanquinegros y su afición vuelven a sonreir.
