viernes. 29.03.2024
En mi caso a mis 35 años, llevo prácticamente los mismos viviendo en Madrid, pero sin perder jamás el contacto con mi lugar de nacimiento, gracias a mis padres, y sin perderme tres fechas: Navidad, Semana Santa y Los Urrutias, (con lo que tu has sido y como te han dejado...). A la hora de ponerme a escribir tuve la tentación de tirar de hemeroteca para recordar los años en los que jugamos en Segunda y en Segunda B y en los distintos grupos en los que nos toco jugar, pero he preferido tirar de la memoria y del corazón para recordarlos.

Uno de mis primeros recuerdos son de una gorra del Cartagena que me regaló mí abuelo Pedro y una bufanda albinegra de mí abuela Carmen a mediados de los ochenta (todavía la conservó y la llevaré este Domingo a Vallecas) y un partido contra el R.C.D Mallorca en el Almajar. En esos años pude ver al Cartagena en el Calderón, en el Bernabeu, en el campo del Rayo, en Getafe (Las Margaritas), en Leganés, en San Sebastián de los Reyes (donde he pasado parte de mi infancia).

La verdad es que todo ha cambiado mucho desde aquellos años 80 y 90, ahora gracias a las nuevas tecnologías es posible estar informado al instante de cualquier acontecimiento que pasa en el mundo del deporte y además de los que se van a celebrar. Pero antes, para saber cuando jugaba el Cartagena en Madrid era casi una odisea pues aunque tenías tu calendario de Liga, tenías que estar muy atento a la prensa o a la radio para conocer las horas de los partidos.

En la década de los ochenta todos los partidos, o casi todos, que jugaba el Efese en Madrid que eran a las 12 del mediodía, y me viene a la cabeza aquellas mañanas madrileñas soleadas en las que quedábamos mi padre, Juan y yo en Plaza Castilla con Eduardo, médico también cartagenero pero madrileño de adopción, y que durante varios años perteneció al cuadro médico del atlético de Madrid de Luis Aragonés y compañía, y cogíamos los tres la Línea 1 del Metro dirección Vallecas hasta la estación de Portazgo para ver jugar a nuestro Efese en el Nuevo Estadio de Vallecas, hoy Teresa Rivero, o como íbamos en coche a Getafe o Leganés, o los partidos en el Calderón y en el Bernabeu contra el Atlético Madrileño y el Castilla (quien tendría la nefasta idea de cambiar los nombres de los filiales), si habéis leído bien, yo puedo decir que he visto jugar al Cartagena en estos dos históricos estadios. Y siempre para celebrar la victoria o la derrota, en el fondo lo que importaba es que nos juntábamos los amigos a ver al Efese, una buena comida en la zona de la Plaza Mayor de Madrid.

Recuerdo como si fuera ayer aquella tarde ya veraniega de la última jornada de la liguilla de ascenso del 91 y aquel partido entre el Getafe y el Racing, que acabó con un gol del Getafe en propia meta ridículo y con las esperanzas de un Cartagena que había ganado el ascenso en el terreno de juego.

El próximo domingo podremos disfrutar los cartageneros madrileños, que somos muchos, otra vez de nuestro equipo en la División de Plata y yo personalmente lo haré con mi mujer, también cartagenera y con mi pequeño hijo.

En fin, con estas breves líneas he pretendido que todos tengamos presentes en nuestra cabeza y en nuestro corazón a todos los cartageneros ausentes que estamos diseminados por toda España, que los hay y muchos, y que cada sábado, domingo y por lo que parece viernes, están atentos de lo que hace nuestro querido Cartagena y por supuesto, sin olvidarnos de todos aquellos que lo han hecho en el pasado.

Este domingo nos volvemos a ver en Vallecas.

Cartageneros en Madrod o 'chulapos' cartageneros
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