10 de marzo de 2010, 1:00
Mientras la tranquilidad reina en La Manga Club, lugar a dónde el Cartagena ha vuelto a entrenar, en el Cádiz aún se recuerda la épica remontada frente al Albacete, del 1-3 al 4-3 definitivo que le ha puesto alas al equipo que nuevamente dirige el veterano uruguayo Víctor Espárrago.
El equipo cadista, antepenúltimo con 28 puntos, se encuentra a dos de lo que sería la salvación. Su referencia es el Celta pero saben bien a dónde van y de las dificultades que van a encontrarse a priori en el Cartagonova con un Cartagena enrabietado después de su última derrota en casa y la necesidad, imperiosa, de callar muchas de las bocas que, últimamente, sólo se abren para criticar no sabríamos decir exactamente qué.
Lo cierto es que para el Cádiz es una de las finales que les queda. Y en Cádiz también saben que uno de los grandes problemas que tiene el conjunto amarillo es su debilidad defensiva: lleva 26 goles encajados en los 14 viajes que ha realizado hasta la fecha, casi a dos goles por partido, exactamente 1,8 goles por partido y mucha culpa la tienen el 4-1 encajado en los campos del Castellón y la Real Sociedad y el 4-0 en Girona aunque también ganó, hace tiempo, en Los Pajaritos de Soria por 1-3 al Numancia. Sirva el dato que sólo el Albacete, con 27 goles encajados, le supera.
El equipo cadista, antepenúltimo con 28 puntos, se encuentra a dos de lo que sería la salvación. Su referencia es el Celta pero saben bien a dónde van y de las dificultades que van a encontrarse a priori en el Cartagonova con un Cartagena enrabietado después de su última derrota en casa y la necesidad, imperiosa, de callar muchas de las bocas que, últimamente, sólo se abren para criticar no sabríamos decir exactamente qué.
Lo cierto es que para el Cádiz es una de las finales que les queda. Y en Cádiz también saben que uno de los grandes problemas que tiene el conjunto amarillo es su debilidad defensiva: lleva 26 goles encajados en los 14 viajes que ha realizado hasta la fecha, casi a dos goles por partido, exactamente 1,8 goles por partido y mucha culpa la tienen el 4-1 encajado en los campos del Castellón y la Real Sociedad y el 4-0 en Girona aunque también ganó, hace tiempo, en Los Pajaritos de Soria por 1-3 al Numancia. Sirva el dato que sólo el Albacete, con 27 goles encajados, le supera.
