El FC Cartagena dijo adiós a la temporada con una merecida derrota en El Sardinero frente al Racing pero, por fortuna para los albinegros, esta no dejó de ser meramente anecdótica ya que la permanencia estaba asegurada desde hacía varias semanas.
De hecho, y pese a los numerosos cambios que efectuó Luis Carrión en el once inicial, prácticamente todo el mundo estaba con la mente puesta en el próximo ejercicio, en el que el presidente, Paco Belmonte, quiere que el nuevo proyecto siga girando en torno al entrenador barcelonés.
De hecho, el propio Carrión aseguraba que hasta que no finalizara la Liga no se sentaría con el máximo dirigente y con el director deportivo, Manolo Sánchez Breis, para tratar sobre su renovación.
En principio, la predisposición por ambas partes es la de mantener unidos sus caminos, tal y como admitía el propio entrenador en rueda de prensa, aunque también advirtió que todo dependería del proyecto deportivo que le presentara el club.
Dentro de ese proyecto estará el centrocampista Mikel Rico, quien ha renovado gracias a una cláusula en su contrato por partidos disputados. Precisamente, Carrión manifestaba hace unas semanas que el mediocampista era una de sus prioridades para el ejercicio 2023/2024, al igual que la continuidad del capitán, Pablo de Blasis, con el que el Efesé también iniciara en breve las negociaciones para que siga ligado al club.
