8 de septiembre de 2010, 2:00
El Cartagena contrató al Tati Maldonado pensando que iba a contar pronto con sus servicios. El ex jugador del Sporting salió de Gijón con unas dolencias antes de acabar su etapa en los del Molinón. Nada importante, se decía, pero su problema clínico no se ha solucionado y no hay fecha respecto al posible debut del media punta. Este martes ha vuelto a entrenar pero sin resultados satisfactorios ya que se retiró con molestias.
El primer enojado por esta situación es el propio Maldonado, quien sufre los efectos de un golpe en su rodilla derecha. Es un dolor intermitente, a lo que parece, que va y viene y que de entrada la primera revisión médica no concedió excesiva importancia. Pero la recuperación del jugador no llega en el tiempo esperado. El edema óseo parece que es el culpable.
No es una lesión que de entrada revista gravedad, pero lo cierto es que retiene al futbolista en la reserva sin que se sepa si esta situación durará dos o cuatro semanas, incluso más tiempo. Una situación que preocupa y que tal vez haya que resolver en el quirófano, si nuevas exploraciones médicas lo aconsejasen.
A la baja temporal de Jordi Pablo, tras su grave lesión en Lorca, de la que fue operado en Valencia, se une el problema del Tati Maldonado. Menos mal que el Cartagena contrató a última hora a Keko, cedido por el Atlético de Madrid.
Juan Ignacio debe de estar preocupado ante la problemática de Tati Maldonado, un futbolista que demuestra un gran pundonor y que arde en deseos de rehabilitarse profesionalmente en Cartagena, después de que en Gijón tan sólo pudiese jugar de titular unos 15 partidos en dos temporadas.
El primer enojado por esta situación es el propio Maldonado, quien sufre los efectos de un golpe en su rodilla derecha. Es un dolor intermitente, a lo que parece, que va y viene y que de entrada la primera revisión médica no concedió excesiva importancia. Pero la recuperación del jugador no llega en el tiempo esperado. El edema óseo parece que es el culpable.
No es una lesión que de entrada revista gravedad, pero lo cierto es que retiene al futbolista en la reserva sin que se sepa si esta situación durará dos o cuatro semanas, incluso más tiempo. Una situación que preocupa y que tal vez haya que resolver en el quirófano, si nuevas exploraciones médicas lo aconsejasen.
A la baja temporal de Jordi Pablo, tras su grave lesión en Lorca, de la que fue operado en Valencia, se une el problema del Tati Maldonado. Menos mal que el Cartagena contrató a última hora a Keko, cedido por el Atlético de Madrid.
Juan Ignacio debe de estar preocupado ante la problemática de Tati Maldonado, un futbolista que demuestra un gran pundonor y que arde en deseos de rehabilitarse profesionalmente en Cartagena, después de que en Gijón tan sólo pudiese jugar de titular unos 15 partidos en dos temporadas.
