jueves. 28.03.2024

La afición recibió a Elady Zorrilla como la auténtica ‘estrella’ del equipo y poco se tardó en escuchar los primeros aplausos desde la grada en una de sus conocidas escaramuzas zigzagueantes que acabaría con el goleador albinegro por los suelos. Elady tenía muchas ganas y los seguidores albinegros también, pero la suerte no sonrío en esta oportunidad.

Elady completó un buen partido en líneas generales, jugó los 90 minutos y acabó siendo el futbolista más peligroso de un Cartagena que siempre acabaría estrellado en la tupida doble barrera defensiva hispalense.

El goleador, si de algo pecó esta vez fue de individualista con acciones que quiso finalizar él mismo pero sin éxito; en otras acababa enfadado con alguno de sus compañeros por no haber puesto el balón por sus dominios.

Lo cierto es que no fue su noche y que, además, estuvo estrechamente vigilado. Por si era poco el colegiado valenciano permitió a los defensores sevillistas cualquier truco a la hora de frenar la velocidad y la intuición goleadora que suele caracterizar al jugador que, aunque acabaría enfadado –como todos- por la derrota, si algo sacó en claro es que la afición cartagenera le quiere y que ha salido ganando en el pulso mantenido con el club albinegro tras el ‘culebrón’ del verano.

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Elady no tuvo su tarde el día de su reaparición/Foto RAUL VELASCO

El ‘efecto Elady’ no funcionó esta vez y el jiennense acabó enfadado
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