El escudo del Mérida lució esta vez en la camiseta de los veintidós futbolistas que pisaban el césped. El motivo ya está dicho: el colegiado se negó a que el Cartagena saltase con su equipación blanquinegra y también con la segunda, que esta temporada, es blanca, con lo que también había coincidencia. Y como el Mérida se negó a cambiar de uniforme no hubo otra opción que le tocaba al Cartagena cambiar de colores.
Y así saltaron al césped del Romano, con una elástica de color naranja que no era desconocido del todo ya que ésa era la segunda equipación de la pasada temporada.