24 de agosto de 2009, 2:00
A una semana para el inicio de la Liga Adelante el Gerona confirmó lo que ya se intuyó días atrás ante el Palafrugell y del Barça Atlètic: que hay mucho trabajo por hacer y que hay que mejorar si no quieren pasar serios problemas en la categoría. El equipo de Cristóbal Parralo cedió ante el Español, un Primera División, en el partido de presentación en Montilivi dentro del Trofeo Centenario Costa Brava y la verdad es que nunca tuvo muchas opciones de evitar la derrota, uinforma Diari de Girona.
Los blanquiazules, en su retorno a los terrenos de juego para competir después de la trágica muerte de Dani Jarque, hicieron suficiente con los goles de Iván Alonso y Luis García en la primera parte para ganar.
En la reanudación, como es habitual en este tipo de partidos, rosario de cambios, campo cada vez más mal, y juego bajo mínimos que sólo la entrada de Manga, autor del golazo que sirvió a los locales para acortar diferencias, pudo animar .
El campo está impresentable y es verdad que no se puede trenzar ninguna jugada, pero también que en los primeros 45 minutos el equipo de Cristóbal no chutó a puerta y la sensación de peligro fue inexistente.
Y en la reanudación sólo el gol de Manga y alguna acción espoleada por este 1-2 sacaron el aficionado local del aburrimiento.
Con sólo uno de los refuerzos que han llegado este verano al equipo titular, Kiko Ratón, los locales salieron con ciertas ganas de agradar a sus seguidores, pero enseguida se vio que quien más iba eran los visitantes.
Tampoco haciendo filigranas, no se piensen, pero sí con hombres como Iván Alonso y Luis García muy activos. Precisamente estos dos fueron los protagonistas de los dos goles que adelantaron los de Pochettino antes del descanso. Primero el ex jugador del Murcia resolvió en el minuto 23 un fulminante contraataque desde la frontal, y un poco más tarde, el 31, su compañero enviaba a la cruceta, de manera magistral, una falta lateral directo después de una salida de Ponza.
Los blanquiazules, en su retorno a los terrenos de juego para competir después de la trágica muerte de Dani Jarque, hicieron suficiente con los goles de Iván Alonso y Luis García en la primera parte para ganar.
En la reanudación, como es habitual en este tipo de partidos, rosario de cambios, campo cada vez más mal, y juego bajo mínimos que sólo la entrada de Manga, autor del golazo que sirvió a los locales para acortar diferencias, pudo animar .
El campo está impresentable y es verdad que no se puede trenzar ninguna jugada, pero también que en los primeros 45 minutos el equipo de Cristóbal no chutó a puerta y la sensación de peligro fue inexistente.
Y en la reanudación sólo el gol de Manga y alguna acción espoleada por este 1-2 sacaron el aficionado local del aburrimiento.
Con sólo uno de los refuerzos que han llegado este verano al equipo titular, Kiko Ratón, los locales salieron con ciertas ganas de agradar a sus seguidores, pero enseguida se vio que quien más iba eran los visitantes.
Tampoco haciendo filigranas, no se piensen, pero sí con hombres como Iván Alonso y Luis García muy activos. Precisamente estos dos fueron los protagonistas de los dos goles que adelantaron los de Pochettino antes del descanso. Primero el ex jugador del Murcia resolvió en el minuto 23 un fulminante contraataque desde la frontal, y un poco más tarde, el 31, su compañero enviaba a la cruceta, de manera magistral, una falta lateral directo después de una salida de Ponza.
