El gol anulado al cartagena (José Gaspar) en el minuto 18 fue completamente legal. Al descanso las imágenes del partido ya lo habían demostrado pero el juez de línea de aquella banda se empeñó erróneamente en levantar el banderín, por cierto de nombre con ascendencia rusa, Sergiy Nizhelovskiy, y que muchos aficionados lo relacionaban en la grada con el parentesco casual de nacionalidad con el presidente ruso del Marbella.
Bromas aparte lo cierto es que el gol debió de haber subido al marcador y con ese 1-0 en el marcador en los primeros 20 minutos es más que probable que el partido habría sido muy distinto y que no se habría llegado a los momentos de nerviosismos que se vivían ya en los minutos previos al gol de Jesús Álvaro.
Para que quede claro: fue gol el de José Gaspar, no había fuera de juego y el juez de línea reconocía al final que se equivocó. Las cosas, como son. Las imágenes no dejan lugar a la duda.