8 de enero de 2014, 13:16
Aumenta el margen de tiempo para que crezcan las especulaciones en este capítulo en el que normalmente se debe pesar con discreción pues afecta al a veces enrevesado entramado de los números de las situaciones financieras de los equipos. Ocurre cuando hay cuentas pendientes con la Agencia Tributaria.
Oficialmente el FC Cartagena informó días atrás en rueda de prensa con sello de urgencia, con Fran de Paula y Cristina Bustillo como portavoces, sobre la situación desencadenada por los deseos -no nuevos pero incrementados desde que se fracasó la tarde de la visita del Caudal de Mieres en el final del frustrado play off de ascenso- de Paco Gómez de bajarse del barco cartagenerista.
Entraba en el escenario la figura del madrileño González Sobrino y a partir de ahora la letra pequeña de lo que se haya hablado entre ambos necesita todavía más letra pequeña. Más garantías para que la operación quede cerrada.Y aclarar conceptos. Elemental y lógico.
{sumario:Paco Gómez, punto en boca en relación con la operación de compra venta:sumario}Paco Gómez elude hablar con los medios y el aspirante a la compra del club ya se ha pronunciado, hasta donde ha podido expresarse, respecto a su solvencia económica.
De momento queda abierto desde este miércoles 8 un compás de espera por la lamentable lesión sufrida en las últimas horas por González Sobrino, un imprevisto que coloca freno relativo a las negociaciones, aunque lo normal es que sigan las gestiones en otros campos en este asunto abierto irremediablemente a los rumores. La demora en la reanudación de las negociaciones será breve, según fuentes del FC Cartagena.
