31 de enero de 2011, 1:00
No faltó tampoco la polémica en la marcha atrás, cantada por otro lado, de Cala, quien ha leído en un folio su ‘mea culpa’ aunque, como suele ocurrir en casos como este, el jugador ha culpado a los medios informativos de malinterpretar sus declaraciones, por cierto que están grabadas y han sido emitidas en televisión.
El sevillano de Lebrija ha leído en un folio que, según él, lo redactó de su puño y letra el domingo por la tarde, y no se admitían preguntas. Cala ha manifestado en su rueda de prensa lo que estaba previsto, lo que resultaba un secreto a voces después de su charla con el presidente Paco Gómez en el polideportivo de La Unión a media tarde. Poco después, al filo de las siete de la tarde, desde el club se emitía una convocatoria para el día siguiente y en la que comparecería el jugador. La cosa estaba clara. Juan Cala iba a reconocer su error aunque no ha faltado la polémica.
Ha dicho que el presidente está al tanto de las ofertas que ha rechazado por seguir en el equipo, que quiere seguir siendo jugador de la plantilla albinegra, que nunca ha salido de su boca “o juego o me voy” y que está disconforme con lo que se ha dicho o escrito, momento en el que surgía la polémica cuando Pepe González, de OM, le recordaba que todas sus palabras están grabadas.
Fueron unos minutos de cierta tensión tras la cual se daba por concluida una rueda de prensa un tanto ‘sui genéris’ y donde Cala también desmentía que fuese la segunda vez que le ocurría algo parecido según se ha podido saber desde el propio vestuario.
El sevillano de Lebrija ha leído en un folio que, según él, lo redactó de su puño y letra el domingo por la tarde, y no se admitían preguntas. Cala ha manifestado en su rueda de prensa lo que estaba previsto, lo que resultaba un secreto a voces después de su charla con el presidente Paco Gómez en el polideportivo de La Unión a media tarde. Poco después, al filo de las siete de la tarde, desde el club se emitía una convocatoria para el día siguiente y en la que comparecería el jugador. La cosa estaba clara. Juan Cala iba a reconocer su error aunque no ha faltado la polémica.
Ha dicho que el presidente está al tanto de las ofertas que ha rechazado por seguir en el equipo, que quiere seguir siendo jugador de la plantilla albinegra, que nunca ha salido de su boca “o juego o me voy” y que está disconforme con lo que se ha dicho o escrito, momento en el que surgía la polémica cuando Pepe González, de OM, le recordaba que todas sus palabras están grabadas.
Fueron unos minutos de cierta tensión tras la cual se daba por concluida una rueda de prensa un tanto ‘sui genéris’ y donde Cala también desmentía que fuese la segunda vez que le ocurría algo parecido según se ha podido saber desde el propio vestuario.
