25 de enero de 2011, 1:00
FICHA TÉCNICA
RESULTADO
FC Cartagena 0-4 Celta de Vigo
ALINEACIONES
FC Cartagena: Casilla (1); Herrero (1), Cala (1), Cygan (2), Txiki (0); Mariano (1), Longás ('0), Toni Moral (1), Víctor (1), Botelho (1); Toché (-).
Celta de Vigo: Falcón (1); Mallo (1), Michu (2), Vila (2), Garai (2), Trashorras (2), Bustos (1), Rodríguez (1), De Lucas (1), Catalá (1), Vícto (1).
GOLES
Min. 8. 0-1. Rodríguez remata un córner a gol.
Min. 40. 0-2. Michu remata una contra llevada por De Lucas.
Min. 60. 0-3. Trashorras define magistralmente una contra.
Min. 81. 0-4. Trashorras vuelve a culminar una contra.
ÁRBITRO
Ceballos Silva, del colegio extremeño.
INCIDENCIAS
21ª jornada de la Liga Adelante. Estadio Cartagonova.
La CRÓNICA
Por GUILLERMO JIMÉNEZ
El Celta no hizo sino confirmar en el estadio Cartagonova su potencial. Ha vencido con contundencia a un Cartagena que vuele a acusar el aguijón en su piel de un gol tempranero.
Mala papeleta para cualquier equipo de carne y hueso, y este Cartagena no es de acero inoxidable. A los ocho minutos fue el astuto David Rodríguez el que clavó el 0-1. Producto de un saque de esquina botado en corto, la jugada continuó y el cazagoles de los vigueses estableció el estreno del marcador. Al equipo máximo goleador de la categoría no se le podían dar ciertas ventajas y los de Paco Herrera cobraron esa renta.
Hasta que llegó el 0-2, en el minuto cuarenta, de Michu en acción por la izquierda de De Lucas, pasaron muchas cosas. Pocas positivas para el Cartagena, que vio cómo su goleador Toché tenía que abandonar el campo a los 11 minutos por una lesión muscular que le tendrá en dique seco un mínimo de dos o tres semanas. Anecdóticamente Toché provocó la cartulina amarilla antes de salir del terreno, para que al ser la necesaria a efectos de la contabilidad para un partido de sanción, el descanso forzoso le sirva de algo práctico.
La ausencia del artillero de Santomera la acusó el equipo de Juan Ignacio Martínez, que hizo el relevo que correspondía al dar entrada a Goiria, pero éste no estuvo fino y su afán no tuvo la compañía del acierto.
Al margen de un gol anulado al propio Goiria, a los 28 minutos, por fuera de juego, el Cartagena no tiró entre los tres palos de Falcón en toda la tarde, si se exceptúa el lejano disparo de Iñaki Muñoz al poste, en el minuto 80, cuando los célticos disfrutaban de una renta de tres goles y el partido estaba sentenciado por la calidad de los galaicos, muy conjuntados, con un buen cierre defensivo, acertados centro de campo y un contragolpe mortífero, con gente que mueve la pelota y busca huecos.
DEMASIADOS PROBLEMAS A CUESTAS PARA EMPEZAR
El Cartagena había comenzado con demasiados problemas frente a un rival cualificado que va directo a Primera, si nadie lo remedia, tal es su grado de valentía, arrojo y acierto para definir en los últimos metros. Los de casa no tuvieron tiempo de tomarle el pulso al encuentro porque a las primeras de cambio un Celta astuto le tomó la delantera desde el inicio.
Este enfrentamiento no tiene más historia que la escrita por el cuadro de Paco Herrera, al frente de un equipo disciplinado y con la moral alta. Se nota esta situación en los apoyos, en el luchar codo con codo, al margen la calidad de sus piezas como Trashorras, David Rodríguez, Michu y el propio Quique de Lucas, vigilado inicialmente por un Txiki que perdió la olla con una extraña y absurda autoexpulsión con roja directa por entrada alevosa a un contrario, sin venir a cuento. Ya realizó algo similar la tarde del Hércules en la pasada Liga.
Al final Botelho, que no tuvo su tarde, acabó jugando prácticamente de delantero por el centro. La localización de un al menos se quedó en intento y el Celta mantuvo a cero su portería, aunque en la primera parte evidenció algunas grietas en defensa que no se pronunciaron porque el Cartagena apretó poco. Desprovisto del abrelatas Toché, la tenacidad de Toni Moral y los recursos de Víctor no cristalizaron esta vez. Mandaban los de Balaídos con temple, seguridad y definición.
La reacción de los aficionados albinegros ante la derrota y la caída de su equipo ante uno de los fuertes, animando cuando todo estaba resuelto, indica una madurez y un comportamiento muy positivo que debe traducirse en la inyección anímica que precisa el conjunto ante la próxima recepción del Xerez.
En Twitter:@guillermoXim
RESULTADO
FC Cartagena 0-4 Celta de Vigo
ALINEACIONES
FC Cartagena: Casilla (1); Herrero (1), Cala (1), Cygan (2), Txiki (0); Mariano (1), Longás ('0), Toni Moral (1), Víctor (1), Botelho (1); Toché (-).
Celta de Vigo: Falcón (1); Mallo (1), Michu (2), Vila (2), Garai (2), Trashorras (2), Bustos (1), Rodríguez (1), De Lucas (1), Catalá (1), Vícto (1).
GOLES
Min. 8. 0-1. Rodríguez remata un córner a gol.
Min. 40. 0-2. Michu remata una contra llevada por De Lucas.
Min. 60. 0-3. Trashorras define magistralmente una contra.
Min. 81. 0-4. Trashorras vuelve a culminar una contra.
ÁRBITRO
Ceballos Silva, del colegio extremeño.
INCIDENCIAS
21ª jornada de la Liga Adelante. Estadio Cartagonova.
La CRÓNICA
Por GUILLERMO JIMÉNEZ
El Celta no hizo sino confirmar en el estadio Cartagonova su potencial. Ha vencido con contundencia a un Cartagena que vuele a acusar el aguijón en su piel de un gol tempranero.
Mala papeleta para cualquier equipo de carne y hueso, y este Cartagena no es de acero inoxidable. A los ocho minutos fue el astuto David Rodríguez el que clavó el 0-1. Producto de un saque de esquina botado en corto, la jugada continuó y el cazagoles de los vigueses estableció el estreno del marcador. Al equipo máximo goleador de la categoría no se le podían dar ciertas ventajas y los de Paco Herrera cobraron esa renta.
Hasta que llegó el 0-2, en el minuto cuarenta, de Michu en acción por la izquierda de De Lucas, pasaron muchas cosas. Pocas positivas para el Cartagena, que vio cómo su goleador Toché tenía que abandonar el campo a los 11 minutos por una lesión muscular que le tendrá en dique seco un mínimo de dos o tres semanas. Anecdóticamente Toché provocó la cartulina amarilla antes de salir del terreno, para que al ser la necesaria a efectos de la contabilidad para un partido de sanción, el descanso forzoso le sirva de algo práctico.
La ausencia del artillero de Santomera la acusó el equipo de Juan Ignacio Martínez, que hizo el relevo que correspondía al dar entrada a Goiria, pero éste no estuvo fino y su afán no tuvo la compañía del acierto.
Al margen de un gol anulado al propio Goiria, a los 28 minutos, por fuera de juego, el Cartagena no tiró entre los tres palos de Falcón en toda la tarde, si se exceptúa el lejano disparo de Iñaki Muñoz al poste, en el minuto 80, cuando los célticos disfrutaban de una renta de tres goles y el partido estaba sentenciado por la calidad de los galaicos, muy conjuntados, con un buen cierre defensivo, acertados centro de campo y un contragolpe mortífero, con gente que mueve la pelota y busca huecos.
DEMASIADOS PROBLEMAS A CUESTAS PARA EMPEZAR
El Cartagena había comenzado con demasiados problemas frente a un rival cualificado que va directo a Primera, si nadie lo remedia, tal es su grado de valentía, arrojo y acierto para definir en los últimos metros. Los de casa no tuvieron tiempo de tomarle el pulso al encuentro porque a las primeras de cambio un Celta astuto le tomó la delantera desde el inicio.
Este enfrentamiento no tiene más historia que la escrita por el cuadro de Paco Herrera, al frente de un equipo disciplinado y con la moral alta. Se nota esta situación en los apoyos, en el luchar codo con codo, al margen la calidad de sus piezas como Trashorras, David Rodríguez, Michu y el propio Quique de Lucas, vigilado inicialmente por un Txiki que perdió la olla con una extraña y absurda autoexpulsión con roja directa por entrada alevosa a un contrario, sin venir a cuento. Ya realizó algo similar la tarde del Hércules en la pasada Liga.
Al final Botelho, que no tuvo su tarde, acabó jugando prácticamente de delantero por el centro. La localización de un al menos se quedó en intento y el Celta mantuvo a cero su portería, aunque en la primera parte evidenció algunas grietas en defensa que no se pronunciaron porque el Cartagena apretó poco. Desprovisto del abrelatas Toché, la tenacidad de Toni Moral y los recursos de Víctor no cristalizaron esta vez. Mandaban los de Balaídos con temple, seguridad y definición.
La reacción de los aficionados albinegros ante la derrota y la caída de su equipo ante uno de los fuertes, animando cuando todo estaba resuelto, indica una madurez y un comportamiento muy positivo que debe traducirse en la inyección anímica que precisa el conjunto ante la próxima recepción del Xerez.
En Twitter:@guillermoXim
