Llegó a Cartagena siendo un desconocido pero a base de buen fútbol y de grandes actuaciones el centrocampista catalán se erigió la pasada campaña en uno de los pilares de aquel Efesé que lograría la salvación in extremis; y eso que solo pudo participar en los últimos partidos ya que su última lesión muscular en esa temporada le apartó de los momentos más importantes. Pero fue tal la simbiosis con la afición que, a su regreso a Gerona, Gallar luchó por regresar, lo que acabaría siendo una alegría para los seguidores, a pesar de haber jugado solo 26 partidos.
Su regreso al Cartagena generó muchas expectativas, pero también demasiadas irregularidades, lo que, junto a sus habituales lesiones musculares, le han hecho perder bastantes encuentros, nueve en total. Ha jugado 33 partidos en la última campaña y se va con 5 goles marcados (2 y 3). Poco más de 4.000 minutos como cartagenerista van a poner fin a la etapa de este buen centrocampista, de carácter un tanto especial a juicio de algunos de sus compañeros.
El Cartagena ya ha dado a conocer su versión, que no volverá a solicitarlo con lo que tratará de cumplir en Gerona el año de contrato que le queda, en Segunda o en Primera División dependiendo de lo que ocurra este domingo en el Heliodoro Rodríguez de Tenerife. Alex Gallar pudo haber sido mucho más pero las lesiones y la irregularidad son parte de los principales motivos para que el de Tarrasa se quede fuera del Cartagena.
En el fondo se marcha un buen futbolista, un tanto irregular, propenso a las lesiones pero buen futbolista.