El mal estado físico en el que terminaron varios de los futboloistas del Cartagena dio mucho que hablar entre los aficionados cartageneristas. El Hércules, en ese aspecto, dio la impresión de ser sensiblemente superior a los albinegros, a los que acabarían ganándole la partida en ese terreno.
El hecho en sí de que varios futbolistas del Cartagena acabasen ‘tocados’ por diferentes motivos dio pie a muchos comentarios en la grada. Sergio García apenas podía correr durante los minutos finales y casi fue una pieza decorativa durante una buena parte de la prórroga; Cristo también se resintió y tuvo que ser tratado continuamente, igual que Gonzálo Verdú y Arturo, quienes necesitaron de asistencia para acabar en las debidas condiciones.
En el caso de Sergio Jiménez su lesión se debió a una jugada fortuita, un doloroso golpe en la espinilla que le hizo bajar muchísimo su rendimiento en la prórroga siendo este uno de los principales motivos por los que el Hércules acabaría siendo el dueño absoluto de la parcela central durante el tiempo extra.
El intenso calor o la larga duración del encuentro (120 minutos más las tandas de penalti) fue el mismo para los dos equipos, con lo que parecen haber pocas excusas en este contexto, máxime teniendo en cuenta que nos encontramos a principios de temporada y se supone que con las fuerzas físicas intactas aún.
Lo que habrá que ver ahora es la factura que puede pasarle al Cartagena el esfuerzo copero de este miércoles con un encuentro que empezó a las 21:30 y finalizó pasadas las doce de la noche si bien cuatro de sus jugadores considerados titulares no actuaron o lo hicieron de forma parcial, como Ceballos (no jugó) o Juanlu Hens, Óscar Rico o Fernando, quienes sí llegaron a intervenir a partir de mitad del segundo tiempo.
