viernes. 29.03.2024

Marcos Morales saltó al terreno de juego a los 21 minutos para suplir al lesionado Pau Torres. Lo hizo en frio y le costó entrar en juego porque coincidió con uno de los momentos de presión onubense. Luego se calmaron los ánimos y ya pasó a ser uno más pero superar su entrada en el césped ya supuso un hándicap de antemano que Morales acabó controlando.

El sobrino de Michel estaba sin jugar desde el gran batacazo con el Betis B. Aquella mañana él era el titular y de alguna manera acabó aguantando el palo de aquella vela que acabaría rota y hundida bajo las profundidades de una goleada que acabó siendo inevitable.

El partido aquel fue el último que jugaría Marcos hasta el partido de Huelva, dónde acabaría encajando un gol evitable por todos los que pasaban por ahí en la última jugada del partido. También es cierto que salvó un balón en la misma línea de gol y que estuvo seguro, especialmente en algunas salidas por alto, dónde no se anduvo con contemplaciones.

El meta Marcos no era titular desde el batacazo con los béticos
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