SPORTCARTAGENA
En el FC Cartagena se ha fallado en muchas cosas pero especialmente en una, en la planificación de la plantilla y en los desfichajes porque cuando se pudo arreglar la plantilla, que fue en enero, no se hizo. Los dos Javieres se cruzaron de brazos y dejaron el cuerpo muerto ante las deudas acumuladas. Se ha venido demostrando en los últimos meses pero es ahora, en el momento más importante, cuando queda claro y se confirma que la programación ficheril ha sido un desastre absoluto. El hecho de contar solamente con un portero que, además, no ha jugado ni un solo minuto, deja con el culo al aire a sus responsables.
Y los responsables tienen nombres y apellidos, el principal de todos en materia de fichajes, Florentino Manzano, un personaje que llegaba de nuevo al Cartagena casi a escondidas, de puntillas 'para que nadie se enterase' pero que todo el mundo sabía que era quien dirigía el cotarro ficheril. Y el resultado salta a la vista con el más absoluto de los descalabros posibles que se hayan dado en la historia futbolística de Cartagena. Peor no se puede hacer.
Junto a Manzano hay que citar a más personas como al uruguayo Julio Ribas. Otro auténtico desastre. La presencia de Ribas en Cartagena ha sido nociva 100% demostrando no tener ni idea ni del fútbol español en general ni de la Segunda B en particular. Su última rueda de prensa fue de lo más esperpéntico que se recuerda en aquel 11 de diciembre en el que parecía que se iba a comer el mundo, repleta de malos gestos, peores modos, y de escasa educación como demostró con los gritos que dio aquel día. Luego se escondió y ya no ha vuelto a aparecer. Un verdadero desastre.
Para rematar ‘la faena’ están los ‘Javieres, Javier Martínez y Javier Marco que, pase lo que pase en el futuro inmediato, siempre van a quedar ligados a la historia del fútbol cartagenero como los peores dirigentes de toda la historia. No solo no pagaron ni cumplieron con sus compromisos y obligaciones sino que despotenciaron al equipo permitiendo sin ningún problema la marcha de jugadores considerados importantes en su momento. Ni supieron fichar, ni supieron desfichar ni han sabido hacer sus deberes. Lo peor de lo peor, futbolísticamente hablando, como dirigentes del Cartagena
Con personajes planificando así, de esta manera, se explica que el Cartagena esté donde esté.
