El Murcia se encontró, una vez pasada la Nochebuena, con todo un problema. Uno de sus futbolistas, Carlos Palazón, fue ‘cazado’ en una macrofiesta ilegal y el club grana, tras abrir una investigación, ha apartado al futbolista. "Cualquier acto que ponga en peligro la salud de toda la población y por ende, la de la primera plantilla tiene que ser sancionado" ha asegurado su presidente Francisco Tornel.
El Real Murcia abrirá un expediente disciplinario a su jugador Carlos Palazón Martínez y le apartará preventivamente del equipo tras conocer que participó en una macrofiesta durante la Nochebuena, actitud irresponsable ante los riesgos de contagio por coronavirus y que el club ha criticado abiertamente a través de un comunicado hecho público.
Desde la entidad que preside Francisco Tornel han querido dejar claro que rechazan "cualquier acto que ponga en peligro la salud de toda la población y por ende, la de la primera plantilla".
Palazón, quien este pasado verano fue subido desde el filial al primer equipo para competir en Segunda División B, asistió a una casa de la localidad murciana de Abarán, donde se celebró una fiesta en la que no se respetaron las restricciones propias de la covid-19 y en la que estuvieron presentes decenas de personas, tal y como se muestra en imágenes y vídeos difundidos en las redes sociales por parte de algunos de los asistentes.
El joven centrocampista, de 21 años y que cumplirá 22 el 11 de marzo, ha participado en cuatro encuentros de esta temporada con apenas 51 minutos en el campo, por lo que es uno de los futbolistas menos utilizados por su entrenador, Adrián Hernández, en un equipo que es el cuarto clasificado del grupo 4B en la categoría de bronce con 13 puntos en ocho partidos disputados en el campeonato.
