El Cartagena, como tenía anunciado desde dos días después de regresar de Madrid, prohibió la entrada al estadio blanquinegro a los aficionados que pudieran acudir con la camiseta del Madrid, salvo a la zona acotada para ellos. La noticia acabaría dando la vuelta a España. Ha sido una de las grandes noticias de la semana
El club lo hizo en clara respuesta al trato vejatorio recibido en Valdebebas por los aficionados blanquinegros, que sufrieron las mismas medidas requisitorias desde el club blanco.
Mientras hubo bombos en otras partes de las gradas de futbol de Valdebebas, donde estaban ubicados los aficionados blancos, a los del Cartagena se les prohibía la entrada de banderas con palo, megáfonos y camisetas del Cartagena en otra zona que no fuese la dedicada a la afición visitante. Un trato vejatorio y discriminatorio para los seguidores cartageneristas, considerado así por la inmensa mayoría de los que acudieron a este partido.
En la vuelta el Cartagena solo quiso responder del mismo modo, prohibiendo la entrada al Cartagonova a todos aquellos seguidores madridistas con una camiseta blanca y el escudo ‘merengue’. Solo pudieron lucir la camiseta del Madrid en la zona acotada por el club para la afición visitante. En el resto del campo no vimos camisetas o banderas del Real Madrid.
El ‘ojo por ojo’ se impuso en esta ‘guerra’ que sorprendentemente inició el propio club madrileño con la imposición de unas medidas que molestaron mucho a los seguidores cartageneros.
LA PELICULA DE LOS HECHOS
Visto así puede parecer un ‘capricho’ o una manera de calentar el partido por parte de Belmonte o Breis, pero nada más lejos de la realidad.
Todo empezó cuando el delegado de seguridad del club ‘merengue’ se puso en contacto con la Federación de Peñas del Cartagena para informarles que los seguidores del Cartagena que acudiesen con las 250 entradas que habían dejado que no podrían portar ni megáfonos ni banderas o pancartas con palos ni camisetas blanquinegras fuera de la zona acotada a los seguidores del Cartagena. Además, había que presentar el DNI con la entrada en la puerta de acceso a las instalaciones.
Hasta ahí todo más o menos bien. Los problemas llegaron después, con el trato incorrecto y en algunos casos mal educado de algunos de los miembros de seguridad asi como de algunos empleados del club blanco, y por si era poco la única cantina existente en la zona donde estaban los seguidores albinegros fue cerrada a cal y canto al descanso. Así lo contaba Pedro González, tertuliano que acudía el pasado lunes a la Tertulia celebrada en las instalaciones de la ciudad deportiva ‘Gómez Meseguer’. “Para darle de beber agua a mi hijo de 6 años tuve que irme a una fuente cercana porque no había ni una gota para llevarse a la boca” explicaba Pedro González.
Es cierto que hubo aficionados de Cartagena que estuvieron viendo el partido en la zona de tribuna con la elástica albinegra puesta y que nadie les dijo nada, habría faltado más desde luego. Y es cierto que no hubo ningún incidente ni antes ni durante ni después pero el trato de algunos empleados del Madrid dejó mucho que desear.
Por todos estos motivos el FC Cartagena decidió la prohibición de camisetas del equipo blanco más allá de la zona acotada para la afición visitante
