Ribas, que llegó esta temporada al club pimontenero procedente del UCAM Murcia, fijó a la hora de firmar el contrato una cláusula que le libera de la entidad murcianista si se retrasa el pago un mes y diez días. En la actualidad son tres meses los que se le adeuda por lo que puede ejercer esa condición y salir de Nueva Condomina.
La intención del guardameta de denunciar al Real Murcia es firme, a no ser que la situación dé un giro, por otro lado inesperado en las próximas horas, y con ello quedaría libre en este tramo final de mercado de invierno y podría encontrar nuevo destino, después de la buena temporada que está firmando en el club murciano.