Belmonte y Breis ya pueden contabilizar su primer gran fracaso desde que aterrizaron en el Cartagena, hace ahora poco más de tres años. La pareja de periodistas murcianos, que han hecho muchas cosas buenas en la parcela económica, también saben ya lo que es morder el polvo de la decepción y del fracaso.
Los dos dirigentes, que a lo largo de los últimos meses, siempre han dejado claro que van a seguir respaldando al preparador cartagenerista, tendrán que asumir esta profunda decepción con el peligro que conlleva de cara a no perder masa social respecto a los casi 7000 abonados con los que ha contado el club.
Todavía perdura en muchos seguidores el gesto de prepotencia que tuvo Belmonte el día que aseguró que, aunque el Cartagena perdiese por 0-23 Monteagudo seguiría en el banquillo. Una apuesta que ahora se enfrenta a una prueba de fuego para ver si Monteagudo, con una gran parte de la afición en contra, es capaz de mantenerse o, por el contrario, prefiere abandonar.
En la sala de prensa y durante su comparecencia ante los periodistas Monteagudo no dijo nada acerca de su continuidad o no, se limitó a hablar sobre el partido.
Belmonte estuvo arropado en el palco por el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López y por la alcaldesa de Cartagena Ana Belén Castejón pero desde la tribuna se dejaron escuchar muchos gritos de protestas contra el gestor blanquinegro por haber mantenido a Monteagudo hasta el final.
El 0-0 final deja al Cartagena sin el ansiado ascenso/RAÚL VELASCO-SCT
