La Liga Smartbank no ha hecho nada más que empezar y ya está colocando a cada equipo en su sitio, al menos por ahora. Y la verdad es que los números y los patrones que se están siguiendo son lo más parecido a los de la pasada temporada en las que, a partir de la segunda vuelta los entonces equipos noveles en la categoría, el Cartagena, Logroñés, Sabadell y Castellón, empezaron a ser los señalados para el descenso. Luego se añadieron otros como el Alcorcón o el Real Zaragoza, pero los dedos acusatorios iban siempre en la misma dirección.
El Cartagena llegó a ser carne de cañón hasta cerca del final. Solo gracias a una segunda vuelta inimaginable, donde fue capaz de sumar 27 puntos –números de playoff- lograría salvarse mientras el resto de equipos que le acompañaron en aquel ‘ascenso express’ de Málaga volvieron al sitio del que venían. Al día de hoy ninguno de ellos lidera alguna de las dos primeras posiciones en los dos grupos de Primera RFEF.
UN EFESÉ MUY DISTINTO HASTA LA FECHA
Por lo que respecta a los cartageneristas las cosas parecen haber cambiado en relación a entonces. Al margen del partido de Éibar están fuera de todo peligro hasta ahora, pero no por ello cabe confiarse. Con tres partidos fallando cualquier equipo puede desplomarse en la clasificación.
La historia siempre se repite y eso es lo que está ocurriendo ya que ni el Burgos (14) ni el Ibiza (16), ni la Real Sociedad B (17) ni el Amorebieta (21) están a salvo de nada, señal de lo que cuesta competir en una categoría como la Liga Smartbank donde la igualdad está a la orden del día.
