2 de marzo de 2011, 1:00
El equipo blanquiazul regresaba de perder su partido contra el Cartagena (1-0) en el estadio Cartagonova. Tras la lógica decepción fue cuando algunos de sus componentes echaron en falta sus objetos personales en su cuartel general del hotel en donde tenía previsto pernoctar tras el choque, ya que este miércoles por la mañana emprenden viaje rumbo a Alicante para volar hasta la Isla por la tarde. En este sentido algunos de los diarios más importantes de laisla ya aparecen este miercoles en sus respectivas ediciones con el suceso.
De este modo la derrota a domicilio cosechada este martes en el Cartagonova no fue la única mala noticia para la expedición del Tenerife. El incidente afectó a algunos de los futbolistas alojados en una de las plantas altas del edificio. De hecho, su primera reacción fue el estupor propio por el robo y, luego, la de bajar para preguntar si también los compañeros hospedados en el piso inferior habían echado en falta alguno de sus enseres personales.
Miembros de la delegación canaria confirmaban que faltaban varios portátiles, así como parte del dinero que los futbolistas suelen llevar consigo a los viajes que realizan a la Península.
El robo motivó que se personaran algunos agentes de policía en el hotel, ubicado en pleno centro de Cartagena, para tomar nota de lo acontecido y recoger las denuncias que plantearon los integrantes de la expedición blanquiazul. Al frente del equipo viajaba en esta ocasión el gerente, Juan Amador, que se hizo cargo de la situación junto al delegado del conjunto isleño, Víctor Padrón.
Todo apunta a que los cacos tenían perfectamente atado su plan para ejecutar el robo, pues aprovecharon las horas que el Tenerife pasó en el estadio cartagenerista para acceder al edificio y entrar en las habitaciones de los futbolistas, las cuales comúnmente suelen estar próximas las unas a las otras.
No obstante, se sospecha que los ladrones pudieran contar, presuntamente, con ayuda de alguien que conociera bien la instalación por dentro, no solo para saber cuáles eran los cuartos donde se alojaba la expedición, sino también para lograr entrar y proceder al saqueo. Se da la circunstancia de que el equipo esta vez sí hizo noche en la misma ciudad donde jugó su compromiso liguero.
En anteriores ocasiones, ha sido frecuente ver al plantel viajar por carretera justo después de acabar sus partidos para evitarse el madrugón del día después y dormir en la misma ciudad de la que parte su avión con destino a la isla.
De este modo la derrota a domicilio cosechada este martes en el Cartagonova no fue la única mala noticia para la expedición del Tenerife. El incidente afectó a algunos de los futbolistas alojados en una de las plantas altas del edificio. De hecho, su primera reacción fue el estupor propio por el robo y, luego, la de bajar para preguntar si también los compañeros hospedados en el piso inferior habían echado en falta alguno de sus enseres personales.
Miembros de la delegación canaria confirmaban que faltaban varios portátiles, así como parte del dinero que los futbolistas suelen llevar consigo a los viajes que realizan a la Península.
El robo motivó que se personaran algunos agentes de policía en el hotel, ubicado en pleno centro de Cartagena, para tomar nota de lo acontecido y recoger las denuncias que plantearon los integrantes de la expedición blanquiazul. Al frente del equipo viajaba en esta ocasión el gerente, Juan Amador, que se hizo cargo de la situación junto al delegado del conjunto isleño, Víctor Padrón.
Todo apunta a que los cacos tenían perfectamente atado su plan para ejecutar el robo, pues aprovecharon las horas que el Tenerife pasó en el estadio cartagenerista para acceder al edificio y entrar en las habitaciones de los futbolistas, las cuales comúnmente suelen estar próximas las unas a las otras.
No obstante, se sospecha que los ladrones pudieran contar, presuntamente, con ayuda de alguien que conociera bien la instalación por dentro, no solo para saber cuáles eran los cuartos donde se alojaba la expedición, sino también para lograr entrar y proceder al saqueo. Se da la circunstancia de que el equipo esta vez sí hizo noche en la misma ciudad donde jugó su compromiso liguero.
En anteriores ocasiones, ha sido frecuente ver al plantel viajar por carretera justo después de acabar sus partidos para evitarse el madrugón del día después y dormir en la misma ciudad de la que parte su avión con destino a la isla.
