Era la temporada 1983/84 y el Cartagena ya se había salvado por los pelos en la anterior, que era su debut en Segunda A después de 20 años de ausencia. En la 83/84 las cosas no habían ido mucho mejor en lo deportivo con lo que se llegaba a la antepenúltima jornada con el agua al cuello.
En el banquillo algecireño un cartagenerista de Algeciras, Francisco Gabriel Navarro González ‘Baby’ y en el del Cartagena un técnico marca de la casa de los históricos de verdad, Paquirri, aunque quien mandaba en realidad era Florentino Manzano, entonces secretario técnico y quien hacía las alineaciones. De hecho, en esta finalísima Paquirri tuvo que variar la alineación inicial que ya le había dado al equipo en el vestuario porque Casimiro Torres era el lateral izquierdo y a Manzano no le gustaba. Quería a Pani, un ‘guerrero’de verdad. Y claro, jugó Pani.
Aquella tarde de mayo con el viejo Mirador hasta los topes, se mascaba la tragedia. Quien perdiera se iba directo prácticamente a Segunda B y el asunto no pudo empezar mejor para el Cartagena porque a los pocos minutos de empezar el partido, un golazo extraordinario de Trasante, hoy técnico de la Deportiva Minera, puso en franquicia a los blanquinegros, y el desaparecido Rivero, al inicio del segundo tiempo, colocaría el 0-2 que ya tranquilizó el resto del partido aunque el Algeciras marcaría muy al final para dejar el 1-2 definitivo.
A la jornada siguiente fue el de aquel famoso Cartagena-Elche del 0-0 y del que “se besen, que se besen” que provocó la pérdida de balones con lo que los últimos minutos no se pudieron jugar. El punto –entonces aún se jugaban con 2 puntos por victoria- aseguraba el ascenso del Elche que dirigía Roque Olsen a Primera y la permanencia cartatgenera en Segunda. Florentino Manzano y Carlos Conesa, entonces secretario técnico –hoy seria el director deportivo- y gerente se encargaron de todos los ‘detalles’ en el vestuario.
