Álvaro González tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla poco antes del descanso. El jugador cayó al suelo y pronto se vio que la dolencia podía ser importante desde el momento que el doctor Pedro Martínez Victorio solicitaba los servicios de la Cruz Roja a la vez que Dani Ábalo salía casi sin calentar.
Y es que el jugador, del que inicialmente parecía que sufría alguna lesión de tobillo, no tardaría en quejarse de la tíbia. Al descanso trascendería en la sala de prensa que su lesión parecía más importante de lo que se temía.
Este lunes le practicarán las pertinentes pruebas en el Centro Médico Virgen de la Caridad. De confirmarse los peores augurios el delantero cartagenerista podría estar bastantes semanas de baja si es que al final tuviese que pasar por el quirófano. En cualquier caso el club no va a pronunciarse hasta contar con un diagnóstico firme de los médicos.