4 de septiembre de 2009, 2:00
Mas advierte con una sonrisa en los labios.
“La verdad es que el remate cabecero no es mi especialidad, pero en esta ocasión la oportunidad se me ha presentado y he podido rematar a gol. Ha sido fantástico comenzar bien”.
Cuando la eliminatoria estaba empinadísima, llegó el flamante “9” del Cartagena para acortar distancias con su gol (1-2) y dar alas al equipo y a la afición, a la que Toché elogia.
“Muy bien la afición, pero confío que me perdonen cuando no pueda conseguir los goles que yo quisiera lograr”, comenta con una nueva sonrisa este hombre que ha recalado en el Cartagonova por decisión de Juan Ignacio, con el que ya coincidió en el Albacete.
-¿Qué va a ocurrir a partir de ahora en los saques de esquina? El miércoles fueron certeros sus remates, con Víctor de lanzador…
- El Albacete quedó atrás. Ha perdido dos partidos seguidos.¿Qué quiere decir eso?
- ¿Esperaba Toché la remontada ante el Elche, con el lastre del 0-2?
LA COPA Y LA LIGA, MUNDOS APARTE
Y mañana sábado,dispuesto a pelear ante el Rayo Vallecano de Pepe Mel, uno de los mejores conjuntos de la categoría, diseñado para pugnar por el ascenso a Primera. Toché, el nuevo “9” del Cartagena, va a estar ahí, en el área visitante de cazagoles, intentando superarse. Ya lleva dos dianas. Es posible que, para no romper la dinámica de la Liga, JIM opte por utilizar la ofensiva empleada en Gerona por un equipo que en Montilivi creó ocasiones de gol con relativa facilidad, con lo que Toché iniciaría el encuentro de espectador pero dispuesto a saltar al campo cuando sea requerido. La Copa y la Liga, competiciones diferentes, se prestan a estas situaciones.
En todo caso, en el ambiente se intuye y se desea que éste puede ser el año bueno de Toché (o sea, José Verdú Nicolás).
“La verdad es que el remate cabecero no es mi especialidad, pero en esta ocasión la oportunidad se me ha presentado y he podido rematar a gol. Ha sido fantástico comenzar bien”.
Cuando la eliminatoria estaba empinadísima, llegó el flamante “9” del Cartagena para acortar distancias con su gol (1-2) y dar alas al equipo y a la afición, a la que Toché elogia.
“Muy bien la afición, pero confío que me perdonen cuando no pueda conseguir los goles que yo quisiera lograr”, comenta con una nueva sonrisa este hombre que ha recalado en el Cartagonova por decisión de Juan Ignacio, con el que ya coincidió en el Albacete.
-¿Qué va a ocurrir a partir de ahora en los saques de esquina? El miércoles fueron certeros sus remates, con Víctor de lanzador…
- Pues normalmente no se me dan muy bien los córneres, pero lo que son las cosas este miércoles se me dio bien todo. Jugué con fe y con confianza. Estaba mi familia en el estadio y me alegra de que fuese así en mi primer partido con el Cartagena.
- El Albacete quedó atrás. Ha perdido dos partidos seguidos.¿Qué quiere decir eso?
- Nada en especial. Yo le deseo a mi anterior equipo toda la suerte del mundo. Creo que han reunido una muy buena plantilla, han llevado nuevos jugadores y lo que ocurre es que necesitarán acoplarse. Ellos se han renovado mucho.
- ¿Esperaba Toché la remontada ante el Elche, con el lastre del 0-2?
- Confieso que cuando nos pusimos en 1-2, sí; era complicado pero había tiempo, no demasiado. Y es que el público nos ayudó muchísimo. Yo tenía esperanza y al final se consiguió.
LA COPA Y LA LIGA, MUNDOS APARTE
Y mañana sábado,dispuesto a pelear ante el Rayo Vallecano de Pepe Mel, uno de los mejores conjuntos de la categoría, diseñado para pugnar por el ascenso a Primera. Toché, el nuevo “9” del Cartagena, va a estar ahí, en el área visitante de cazagoles, intentando superarse. Ya lleva dos dianas. Es posible que, para no romper la dinámica de la Liga, JIM opte por utilizar la ofensiva empleada en Gerona por un equipo que en Montilivi creó ocasiones de gol con relativa facilidad, con lo que Toché iniciaría el encuentro de espectador pero dispuesto a saltar al campo cuando sea requerido. La Copa y la Liga, competiciones diferentes, se prestan a estas situaciones.
En todo caso, en el ambiente se intuye y se desea que éste puede ser el año bueno de Toché (o sea, José Verdú Nicolás).
