FICHA TÉCNICA
RESULTADO
FC Cartagena 0-0 Las Palmas At.
ALINEACIONES
FC Cartagena: Manzanares; Ceballos, Robusté, Tarantino, Germán; Sergio, Arcas, Prosi (78’ Chus Hevia); Migue, Santisteban (82’ Segura), Gato (52’ Carlos M.).
Las Palmas At.: Ale; Nili, Jesús, Álvaro, Matías, Óscar, Germán, José Delgado, Adrián (81’ Manu Dimas), Néstor (68’ Enrique), Artiles (71’ Borja).
GOLES
ÁRBITRO
Ávalos Barrera, del colegio catalán. Amonestó a Tarantino, Germán, Ceballos y Sergio por los locales y a Nili y Enrique por los visitantes. Expulsó a José Delgado por doble amarilla.
INCIDENCIAS
Alrededor de 11.000 personas en el estadio Cartagonova.
CRÓNICA
Por CARLOS SÁNCHEZ / Fotos de RAÚL VELASCO
Tras 90 minutos de idas y venidas, dominio alterno, peligro en ambas áreas, expulsiones, momentos buenos y muchos malos, Cartagena y Las Palmas Atlético han terminado citándose para dentro de siete días en el Anexo de Gran Canaria. Los locales terminaron muy mermados, los visitantes con uno menos, y ambos han preferido guardar las naves para la batalla final. No es mal resultado para los albinegros, ni mucho menos. Cualquier empate en Las Palmas es válido para conseguir el objetivo: salvar los muebles.
Dos partes bien diferenciadas en la primera mitad. Durante media hora el Cartagena llevó la iniciativa, dominó, creó peligro y tuvo las mejores oportunidades. Durante media hora Gato llevó loco a Óscar, central canario, que no era capaz de prever los movimientos del delantero. Durante media hora el balón fue indiscutiblemente albinegro. Arcas ya avisó con cabezazo que se perdió por poco cuando todavía no se contaba ni un minuto. Pero la palma fue para Tarantino. El vasco fusiló desde la frontal del área chica un balón que se quedó botando. Más que un balón era una tentación irresistible, un llamamiento al pecado.
Sin embargo, esa bicoca terminó rechazada por el cuerpo del meta Ale, y ahí se produjo el punto de inflexión, el cambio de poderes. A partir de entonces, la manija fue canaria sin discusión. Néstor, Artiles, Germán y Adrián se pusieron a jugar y se acercaban peligrosamente a la meta de un Manzanares que, eso sí, no tuvo intervenciones en la primera mitad. Los nervios llegaron con un disparo de Artiles que culminó una combinación en la frontal del área. Pero el tiempo se alió con los albinegros y se llegó al descanso con empate a cero final.
SIGUIÓ EL DOMINIO AMARILLO
La segunda mitad se inició como un calco de los últimos minutos del primer tiempo. El peso del partido era de los visitantes sin discusión. El panorama que se abría era el esperado desde el inicio, pero fue entonces cuando al Cartagena se le rompió la punta de la lanza. Gato, el hombre que mantenía en tensión a la defensa local, tuvo que retirarse lesionado. Todo apunta a una rotura – esperemos que microrrotura – muscular y quedamos pendientes de evolución para saber si podrá estar o no en Las Palmas. Entró Carlos Martínez y Migue se situó en la punta, pero nada fue como antes.
Unos minutos después, y cuando peor pintaba el partido, todo se suavizó. Delgado vio la segunda cartulina amarilla dejando a los suyos con diez, aunque poco afectó. Las Palmas siguió siendo mejor aún en inferioridad, y estaba más cerca el 0-1 que el 1-0 a pesar de las circunstancias. Porque al Cartagena le seguían lloviendo las bajas. Se marcharon Prosi y Santisteban lesionados y entraron Segura y un Chus Hevia que no estaba para absolutamente nada.
NOS VEMOS EN LA VUELTA
Conforme pasaban los minutos sin que ninguno pudiera hacer daño al otro, se firmó un pacto tácito de no agresión. El Cartagena se veía mermado por la enfermería, Las Palmas se veía en inferioridad y ambos daban por bueno el empate sin goles. Los canarios se ven con la fuerza suficiente como para pensar en vencer a los albinegros jugando ante su público, los cartageneristas lo fían todo a cosechar un nuevo empate, especialidad de la casa esta temporada. Por cierto, mención de honor para un Ceballos omnipresente, medalla de plata a Sergio y de bronce para un Manzanares que ha transmitido mucha, mucha seguridad en la portería tras haber estado en el ojo del huracán durante la semana.
Así pues, todo se decidirá en las islas afortunadas. Gran Canaria puede pasar a ser un escenario de grato recuerdo para la hinchada albinegra, o el marco de un nuevo fracaso en los años de historia del fútbol cartagenero, más acostumbrado a saborear amargura que dulzura. Todo en juego en 90 minutos (o quizá 120, quien sabe) que obligarán a tilas más de uno.
