“Tenemos confianza, y mucha, pero también es verdad que nos vamos a enfrentar a un rival que en el partido de ida ya demostró ser muy complicado de batir”. Son palabras de Manolo Palomeque, entrenador de La Unión de cara al encuentro de este domingo en el que el vencedor logrará el premio que ha perseguido durante diez meses: el ascenso de categoría.
El pasado domingo en el Polideportivo unionense ambos conjuntos realizaron un partido de los que pueden calificarse como ‘de respeto’. Escasas ocasiones de gol, excesivo centrocampismo, pocas aproximaciones al área contraria y, pese a la mayor calidad técnica de los jugadores albiazules, la garra, la pelea y, sobre todo, la buena colocación de los asturianos en el terreno de juego impidieron que La Unión afrontara el choque de este domingo con ventaja en el marcador.
El partido acabó 0-0 y, por tanto, todo queda a una sola carta. Y Palomeque tiene un ‘as’ guardado en la manga, tal y como sucedió en el partido de vuelta de la final regional ante el Lorca Deportiva en el que fue capaz de vencer a los de José Luis Acciari en la prórroga con un golazo de Álex Briega de falta directa.
Los unionenses saben que la tarea no va a resultar nada sencilla y mucho más teniendo en cuenta que el estadio Nuevo Nalón va a presentar un lleno absoluto con 1.200 espectadores en las gradas.
Serán noventa minutos de infarto, de sufrimiento, de pelea y, sobre todo, de conseguir un premio que merecen los murcianos.