22 de marzo de 2014, 13:38
Hace unos días supimos que el FC Cartagena suprimía los servicios de la seguridad privada en el Estadio Cartagonova. Este sábado volvía la decena de vigilantes que pudimos ver distribuidos por las distintas puertas primero y sobre el terreno de juego después.
Los vigilantes de seguridad se suprimieron estrictamente por motivos económicos. La presencia de cada uno de estos vigilantes suele costarle al club unos 100 euros por persona con lo que, si eran 20 los que acudían, significaban 2.000 euros por partidos, unos 4.000 euros mensuales que se decidieron restringir.
La llegada de los nuevos dueños ha supuesto un cambio de rumbo en ese sentido ya que la seguridad privada es importante a la hora de controlar los accesos. Parece que las aguas en este sentido vuelven a su cauce a juzgar por lo visto este sábado en el Cartagonova.
