Minutos antes de que comenzara el encuentro en Murcia, todas las miradas estaban puestas en los dos nuevos fichajes del conjunto cartagenero, Adeirton y Rafinha, que calentaban con el resto de sus compañeros a la espera de confirmarse la posibilidad de su participación en el derbi. Pero la “buena noticia” no llegó pese a que durante los últimos días el Club trabajara incansablemente para que los transfer estuvieran a tiempo.
Lo paradójico de la situación es que tales documentos ya estaban en España, enviados a través de un fax de la CBF a las oficinas de la Real Federación Española de Fútbol, a falta de que algún responsable de tal entidad corroborara la veracidad de dichos papeles y diera luz verde a tan esperado como necesario debut.
Pero pedir que en la sede de la RFEF se encuentre alguien trabajando un viernes por la tarde es pedir demasiado para un deporte como el Fútbol Sala. Tan triste como real. Desde el Club queremos agradecer a nuestro Director de Competición, Don Ignacio Vicente, que estuvo esperando en la sede de la LNFS hasta instantes previos del partido, a que llegara dicha documentación.
Las nuevas figuras brasileñas bien podían haber cambiado el juego del Reale, aportando llegada, experiencia y calidad al grupo, pero lo más importante, solventarían la carencia de rotación en el banquillo. Si a esta mera anécdota le añadimos que estamos ante un rival de la talla de ElPozo, difícil lo tenían los albiazules para arrancar algún punto del Palacio de los Deportes.
