1 de mayo de 2012, 16:44
El Reale Cartagena trabaja con aparente normalidad de cara a su penúltimo partido en Primera División, al menos durante esta temporada.
El conjunto cartagenero, en plena digestión de ese traumático descenso, juega este sábado en el Pabellón navarro (18:00 hora) ante un Ríos Renovables Ribera Navarra que con sus 30 puntos, ya no tiene nada que hacer en la competición.
Por cierto que el partido se marcaba desde la LNFS para el viernes pero el jefe de prensa del Ríos Renovables Ribera Navarra, Óscar Saso, nos informa y nos aclara que el choque se jugará en sábado y no en viernes, como se ha estado diciendo.
No obstante, en el equipo cartagenero se trata de ofrecer una imagen de relativa normalidad aunque todo el mundo sabe que la situación es alarmante, el propio presidente del club dijo apenas finalizar el choque que este descenso podría suponer la desaparición del club después de escribir brillantes páginas en el panorama del fútbol sala español.
No obstante Mínguez se lo piensa. A sus íntimos ya les ha dicho que no piensa seguir aunque el dirigente no descarta ninguna idea. Se ha marcado un plazo de un mes para saber si decide apostar por un regreso inmediato a la máxima categoría o decide bajar los brazos de un modo definitivo.
El conjunto cartagenero, en plena digestión de ese traumático descenso, juega este sábado en el Pabellón navarro (18:00 hora) ante un Ríos Renovables Ribera Navarra que con sus 30 puntos, ya no tiene nada que hacer en la competición.
Por cierto que el partido se marcaba desde la LNFS para el viernes pero el jefe de prensa del Ríos Renovables Ribera Navarra, Óscar Saso, nos informa y nos aclara que el choque se jugará en sábado y no en viernes, como se ha estado diciendo.
No obstante, en el equipo cartagenero se trata de ofrecer una imagen de relativa normalidad aunque todo el mundo sabe que la situación es alarmante, el propio presidente del club dijo apenas finalizar el choque que este descenso podría suponer la desaparición del club después de escribir brillantes páginas en el panorama del fútbol sala español.
No obstante Mínguez se lo piensa. A sus íntimos ya les ha dicho que no piensa seguir aunque el dirigente no descarta ninguna idea. Se ha marcado un plazo de un mes para saber si decide apostar por un regreso inmediato a la máxima categoría o decide bajar los brazos de un modo definitivo.
