Ana lleva dos semanas de intensas sesiones de rehabilitación en la clínica y ahora comienza los entrenamientos en las pistas. En un principio está previsto que comience a rodar con las pequeñas motos de Supermotard en los circuitos pequeños, y la próxima semana coger la GSXR 600 en el circuito de Cartagena.
La propia Ana asegura que “ha sido muy duro estar inactiva cuatro meses, la lesión que parecía simple, se complico porque no “soldaba” el hueso; ahora intentaré alcanzar la forma cuanto antes para poder participar en las carreras que quedan hasta final de temporada que finaliza en noviembre”.
Antonio Martínez, director del equipo, considera que “hoy por fin vemos el final de un largo túnel, al que nos ha llevado la lesión de Ana. Esperamos que evolucione rápidamente en su readaptación a la moto y que pronto podamos estar compitiendo en las carreras, que es el motivo por el que estamos en este proyecto. Desde aquí agradecer a los colaboradores y patrocinadores la confianza depositada en nosotros”.