24 de noviembre de 2009, 1:00
Los dos están bien, han pasado por Toledo, han hecho fotos, mejoran del resfriado y duermen de nuevo en un polideportivo que les ha gestionado la Policía Local de esta localidad donde, naturalmente, hace frio. A partir de mañana empieza lo duro, lo bueno como dicen ellos. Ya empiezan a rozar casi la mitad de esta loca y bella aventura.
Hoy escriben: DANI CEGARRA Y JOSE RAYOS
Parece que vamos mejorando de nuestros catarros aunque yo, esta noche, lo he pasado más mal que nada. A las tres de la mañana he tenido que salir del saco porque la fiebre me estaba subiendo. He empezado a sudar un montón, me he levantado hecho polvo y he tenido que poner hasta la calefacción en el hostal donde estábamos. José se acostó mal pero sin embargo se ha levantado nuevo.
Por eso hemos salido de Mora, en la provincia de Toledo, a las nueve de la mañana. Sobre las once de la mañana hemos llegado a Toledo capital, hemos hecho 2 ó 3 fotos, con el Alcazar al fondo en una y hemos seguido en dirección Ávila parando en Torrijos.
Hoy la comida no ha estado mal: cochinillo con sus patatas y su guarnición, la verdad es que no ha sentado bastante bien. Hasta ahí llevábamos 69 kilómetros y en total hoy hemos hecho 125 durante todo el día.
De tiempo ha sido hoy 6 horas y 50 minutos. Al llegar a Toledo hay un trozo que no hay más remedio que hacerlo por la carretera y hemos llegado a coger una velocidad máxima de 74 kilómetros por hora, la máxima que hemos cogido hasta ahora. Habría estado bien que nos hubiese pillado el radar y nos hubiese multado ¿verdad?
Ahora mismo, cuando son las ocho y diez de la tarde, estamos en un bar que hay justo al lado del Polideportivo, porque esta noche vamos a pasarla aquí, en este pabellón. Hemos cenado carne con patatas fritas para salir del paso. Después del pedazo de plato de cochinillo tampoco teníamos demasiada hambre.
Lo hemos encontrado porque hemos estado preguntando en el cuartelillo de la Policía Local, no sabíamos en dónde estaba, hemos marcado el 112 y a los dos minutos se han presentado dos coches de la Policía Local que nos han tratado fenomenal y nos han atendido súper bien. Ellos son los que nos han llevado hasta este polideportivo, ahora nos estamos tomando una manzanilla y enseguida nos vamos a ir a la cama, ahora sobre las diez de la noche. El conserje, que se llama Félix, nos dirá cuando y en dónde vamos a pasar la noche.
Los últimos 15 kilómetros para llegar a San Martín de Valdeiglesias eran cuestas muy, muy empinadas. Muchas veces nos hemos tenido que poner de pie en la bici para hacer más fuerzas porque íbamos demasiado clavados. Al llegar aquí la gente cuando hemos llegado nos ha atendido muy bien. La Policía nos ha dicho que también había otro peregrino, que va andando. Es el primero que nos encontramos después de cuatro días.
A partir de ahora ya viene lo bueno, mañana queremos llegar hasta Arévalo, un pueblo que está pasado Ávila, queremos hacer aproximadamente unos 160 ó 170 kilómetros. Hace frio, aunque vamos muy bien abrigados hace frio. En cuanto nos paramos nos enfriamos muchísimo de todo el sudor que llevamos.
Por dónde vamos nos apoyan y nos animan, cuando nos ven se quedan un poco asustados por todo lo que llevamos. Por donde pasamos hacemos ojo, esa es la verdad. Llevamos 575 kilómetros en cuatro días, o sea que nos queda poco más de la mitad. Cuando lleguemos hasta Arévalo llevaremos unos 700.
Ya estamos pensando en lo qué vamos a hacer el año que viene, nuestra próxima locura, que será el Sáhara, no es broma, es verdad. Dani dice que no pero yo digo que sí, cruzaremos el desierto, soy muy cabezón, lo que me propongo lo hago aunque eche el hígado por la boca ¡ Que disparate¡
Un saludo muy grande a todos los que nos estáis animando a través de SPORTCARTAGENA.ES en el foro que leemos y que tanta fuerza nos está dando.
Hoy escriben: DANI CEGARRA Y JOSE RAYOS
Parece que vamos mejorando de nuestros catarros aunque yo, esta noche, lo he pasado más mal que nada. A las tres de la mañana he tenido que salir del saco porque la fiebre me estaba subiendo. He empezado a sudar un montón, me he levantado hecho polvo y he tenido que poner hasta la calefacción en el hostal donde estábamos. José se acostó mal pero sin embargo se ha levantado nuevo.
Por eso hemos salido de Mora, en la provincia de Toledo, a las nueve de la mañana. Sobre las once de la mañana hemos llegado a Toledo capital, hemos hecho 2 ó 3 fotos, con el Alcazar al fondo en una y hemos seguido en dirección Ávila parando en Torrijos.
Hoy la comida no ha estado mal: cochinillo con sus patatas y su guarnición, la verdad es que no ha sentado bastante bien. Hasta ahí llevábamos 69 kilómetros y en total hoy hemos hecho 125 durante todo el día.
De tiempo ha sido hoy 6 horas y 50 minutos. Al llegar a Toledo hay un trozo que no hay más remedio que hacerlo por la carretera y hemos llegado a coger una velocidad máxima de 74 kilómetros por hora, la máxima que hemos cogido hasta ahora. Habría estado bien que nos hubiese pillado el radar y nos hubiese multado ¿verdad?
Ahora mismo, cuando son las ocho y diez de la tarde, estamos en un bar que hay justo al lado del Polideportivo, porque esta noche vamos a pasarla aquí, en este pabellón. Hemos cenado carne con patatas fritas para salir del paso. Después del pedazo de plato de cochinillo tampoco teníamos demasiada hambre.
Lo hemos encontrado porque hemos estado preguntando en el cuartelillo de la Policía Local, no sabíamos en dónde estaba, hemos marcado el 112 y a los dos minutos se han presentado dos coches de la Policía Local que nos han tratado fenomenal y nos han atendido súper bien. Ellos son los que nos han llevado hasta este polideportivo, ahora nos estamos tomando una manzanilla y enseguida nos vamos a ir a la cama, ahora sobre las diez de la noche. El conserje, que se llama Félix, nos dirá cuando y en dónde vamos a pasar la noche.
Los últimos 15 kilómetros para llegar a San Martín de Valdeiglesias eran cuestas muy, muy empinadas. Muchas veces nos hemos tenido que poner de pie en la bici para hacer más fuerzas porque íbamos demasiado clavados. Al llegar aquí la gente cuando hemos llegado nos ha atendido muy bien. La Policía nos ha dicho que también había otro peregrino, que va andando. Es el primero que nos encontramos después de cuatro días.
A partir de ahora ya viene lo bueno, mañana queremos llegar hasta Arévalo, un pueblo que está pasado Ávila, queremos hacer aproximadamente unos 160 ó 170 kilómetros. Hace frio, aunque vamos muy bien abrigados hace frio. En cuanto nos paramos nos enfriamos muchísimo de todo el sudor que llevamos.
Por dónde vamos nos apoyan y nos animan, cuando nos ven se quedan un poco asustados por todo lo que llevamos. Por donde pasamos hacemos ojo, esa es la verdad. Llevamos 575 kilómetros en cuatro días, o sea que nos queda poco más de la mitad. Cuando lleguemos hasta Arévalo llevaremos unos 700.
Ya estamos pensando en lo qué vamos a hacer el año que viene, nuestra próxima locura, que será el Sáhara, no es broma, es verdad. Dani dice que no pero yo digo que sí, cruzaremos el desierto, soy muy cabezón, lo que me propongo lo hago aunque eche el hígado por la boca ¡ Que disparate¡
Un saludo muy grande a todos los que nos estáis animando a través de SPORTCARTAGENA.ES en el foro que leemos y que tanta fuerza nos está dando.
