Una veintena de embarcaciones se enfrentaron al clásico recorrido, con salida en las inmediaciones de la bocana del milenario puerto y dos balizas entre cabo Tiñoso y el islote de las Palomas. Y aunque las previsiones de eran decepcionantes, la flota pudo aprovechar los vientos del tercer cuadrante, con una intensidad media de ocho nudos, que llevaron a una regata muy rápida.
La próxima cita en la que se enfrentarán los mejores veleros de la región será el 15 de febrero, indispensable para puntuar en un trofeo que se extenderá hasta el 5 de abril.