Nadie en la familia de Rosario Turpín se explica lo que ha tenido que pasar por la cabeza de la ex directora de la Piscina Municipal de Cartagena para entrar en una historia tan inesperada como alucinante. Ahora mismo, el futuro inmediato de la cartagenera pasa por permanecer detenida en Roma, bajo el arresto de la Guardia di Finanzi, que es el cuerpo de seguridad italiano que ha llevado el caso.
Su traslado hasta España no se contempla por ahora porque todo está pendiente de las decisiones que adopte el juez que maneja este caso, que no dejará de ser uno más de los que se producen en cualquier aeropuerto pero que en Cartagena y en Torre Pacheco han causado una profunda conmoción al ser Rosario una persona especialmente conocida por su trabajo en un sitio público como la piscina cartagenera, en dónde destacaba por su corrección y su trato exquisito con los usuarios.
La familia de Rosario se está expresando a través de las redes sociales. “No sabemos qué le ha podido pasar para hacer o dejarse llevar por cosas como esta. Ella es una persona titulada, maneja dos idiomas, ha trabajado sola para levantar a sus hijas, es independiente... De verdad, es una mujer maravillosa. La familia no entiende que ha pasado”, ha dejado escrito una prima de Rosario en su cuenta de Facebook, añadiendo su hermana un agradecimiento. “Muchas gracias a todos por vuestros mensajes de apoyo, colaboración y cariño”.
Los amigos y compañeros de Rosario están conmocionados con esta situación, tan inesperada y tan convulsa en la que pocos son los que saben en realidad los pasos a seguir. La Guardia Civil, que era la encargada de realizar las pepquisas necesarias para localizarla, ha dado por concluido su trabajo que ahora pasa a manos italianas y deberán ser las autoridades judiciales italianas las que tomen una decisión sobre su futuro.
La Guardia Civil, no obstante, mantiene abierta su investigación para determinar si existen más personas implicadas en este caso y si Rosario entró en alguna red organizada ya que su teléfono móvil fue localizado en Marruecos y coincide con la relación sentimental que mantenía con un marroquí de unos 35 años, que también ha sido interrogado por la Benemérita.
A pesar de todo la familia de Rosario está contenta porque se encuentra bien de salud, a pesar de las circunstancias adversas.
