27 de marzo de 2010, 1:00
Queridos amigos futboleros : parto de la premisa que todo el deporte en general, y muy en particular, el fútbol, debe servir para unir, jamás para hacer sentir hacia el prójimo, un sentimiento de odio y rencor; y con la particularidad añadida, que nunca se debe de mezclar, deporte con política; y digo esto, para intentar olvidar de una vez, -si es que puede ser-, la famosa pancarta causante de la polémica y se vea que, lo que ocurre, es –totalmente- al revés; es decir : “Mursyya es Cartaginense” o “Murcia es Cartagena” o “Al César lo que es del César”.
La consideración, en cuestión, va referida a que en un momento determinado, el cartagenero de “a pie”, y consecuentemente, el cartagenero “amante del fútbol”, puede pensar que, en pasajes determinados, somos tremendamente calientes y en otros, abúlicos o quizás nos desanimamos a las primeras de cambio. Es por ello que, con estas palabras, me referiré, -amistosamente, eso sí-, a nuestros paisanos “peloteros” coprovincianos; porque el camino se demuestra andando, que ahí está nuestra historia, -ahí queda escrita nuestra historia-, hago hincapié en ello y que por mucho polvo que le caiga encima (-léase, Regional Preferente, 3ª división, 2ª división B, desaparición y otras muchas vicisitudes, etc-), debe ser un orgullo, para todos los que nos vanagloriamos de ser cartageneros, cartageneristas, “aladroques” o como se nos quiera llamar, saber que en primer lugar, y según manifiesto general cartaginés, Cartagena, ha sido la capital de las Regiones Históricas: Masiena, Mastiena, Bastiena, Turdetana-Citérior, Contestana y Cartaginense.
El epónimo gentilicio Agris Diócesis Regioni es Cartaginense. Cartagena fue, en su momento, Ciudad-Estado y capital de la Confederación Tarthésica, capital de la España púnica, co-capital de la Hispania-Citérior, Cabeza de Colonia Latina, cabeza de Convento Jurídico, capital y metrópoli de Magna Provincia Civil y metrópoli Archidiocesana; además de capital de la provincia de Spania o provincia Imperial o Bizantina y, aunque les pese a nuestros amigos limítrofes y, a la vez, –enemigos futbolísticos-, miles de años antes de que naciese la huertana y medieval Mursyya (actual Murcia), que lo haría hacia el 25 de Junio del año 825, en un lugar rural de la vieja Entidad Regional Histórica Tartheso-Mastiena / Cartaginense- Hispania; es por lo que, a título de ejemplo, si la localidad medieval de Mursyya (Murcia, hoy) hubiese nacido en Galicia, obviamente por “Humanidades”, sus nativos serían gallegos, si hubiesen nacido en Cantabria, serían cántabros; luego por nacer en la Región Cartaginensis o de Carthago, por Entidad Regional Histórica, son mis queridos amigos cartageneristas, tan cartagineses como todos los demás.
No es, pues, entelequia o simple sentimiento, cuando cualquiera de nosotros, -ligados al fútbol o no-, aún desconociendo lo anteriormente expuesto digamos, aunque no valga para nada, que no somos murcianos; cuando, realmente, lo que ocurre es, justo justo, al revés : “los murcianos son cartagineses”, por invariable Substrato Regional Histórico.
Y dicha, pues, esta amistosa y breve consideración histórica, vamos a centrarnos ahora en lo mas inmediato e importante para la parroquia blanquinegro (o amarilla, según el caso), o lo que es lo mismo : ¡a por el Elche, Las Palmas, Real Murcia…! y así sucesivamente, hasta ver si, -definitivamente- podemos conseguir ese “dulce caramelico” que tenemos tan “cerquica” de la boca y que, como bien sabemos, se llama : ”Liga de las Estrellas”. ¡Aúpa siempre el Cartagena, esté en la categoría que esté!.
La consideración, en cuestión, va referida a que en un momento determinado, el cartagenero de “a pie”, y consecuentemente, el cartagenero “amante del fútbol”, puede pensar que, en pasajes determinados, somos tremendamente calientes y en otros, abúlicos o quizás nos desanimamos a las primeras de cambio. Es por ello que, con estas palabras, me referiré, -amistosamente, eso sí-, a nuestros paisanos “peloteros” coprovincianos; porque el camino se demuestra andando, que ahí está nuestra historia, -ahí queda escrita nuestra historia-, hago hincapié en ello y que por mucho polvo que le caiga encima (-léase, Regional Preferente, 3ª división, 2ª división B, desaparición y otras muchas vicisitudes, etc-), debe ser un orgullo, para todos los que nos vanagloriamos de ser cartageneros, cartageneristas, “aladroques” o como se nos quiera llamar, saber que en primer lugar, y según manifiesto general cartaginés, Cartagena, ha sido la capital de las Regiones Históricas: Masiena, Mastiena, Bastiena, Turdetana-Citérior, Contestana y Cartaginense.
El epónimo gentilicio Agris Diócesis Regioni es Cartaginense. Cartagena fue, en su momento, Ciudad-Estado y capital de la Confederación Tarthésica, capital de la España púnica, co-capital de la Hispania-Citérior, Cabeza de Colonia Latina, cabeza de Convento Jurídico, capital y metrópoli de Magna Provincia Civil y metrópoli Archidiocesana; además de capital de la provincia de Spania o provincia Imperial o Bizantina y, aunque les pese a nuestros amigos limítrofes y, a la vez, –enemigos futbolísticos-, miles de años antes de que naciese la huertana y medieval Mursyya (actual Murcia), que lo haría hacia el 25 de Junio del año 825, en un lugar rural de la vieja Entidad Regional Histórica Tartheso-Mastiena / Cartaginense- Hispania; es por lo que, a título de ejemplo, si la localidad medieval de Mursyya (Murcia, hoy) hubiese nacido en Galicia, obviamente por “Humanidades”, sus nativos serían gallegos, si hubiesen nacido en Cantabria, serían cántabros; luego por nacer en la Región Cartaginensis o de Carthago, por Entidad Regional Histórica, son mis queridos amigos cartageneristas, tan cartagineses como todos los demás.
No es, pues, entelequia o simple sentimiento, cuando cualquiera de nosotros, -ligados al fútbol o no-, aún desconociendo lo anteriormente expuesto digamos, aunque no valga para nada, que no somos murcianos; cuando, realmente, lo que ocurre es, justo justo, al revés : “los murcianos son cartagineses”, por invariable Substrato Regional Histórico.
Y dicha, pues, esta amistosa y breve consideración histórica, vamos a centrarnos ahora en lo mas inmediato e importante para la parroquia blanquinegro (o amarilla, según el caso), o lo que es lo mismo : ¡a por el Elche, Las Palmas, Real Murcia…! y así sucesivamente, hasta ver si, -definitivamente- podemos conseguir ese “dulce caramelico” que tenemos tan “cerquica” de la boca y que, como bien sabemos, se llama : ”Liga de las Estrellas”. ¡Aúpa siempre el Cartagena, esté en la categoría que esté!.
