Tengo recogidas y guardadas, en un arcón con cuatro llaves, todas las declaraciones que, a lo largo de estos meses, desde el mes de diciembre del pasado 2011, ha ido soltando el hasta ahora entrenador del FC Cartagena D. Carlos Ríos Vidal y, hurgando en ellas, no me he encontrado con ninguna que más o menos viniera a decir: “Hoy hemos jugado de escándalo”.
No me extraña que Ríos, por ser dicharachero, no conozca el significado de la palabra escándalo y es por ello por lo que no lo ha utilizado, o puede que, conociendo su significado, no haya querido emplearla dando a entender que todos los partidos jugados por su Cartagena han sido partidos de escándalo. Sea cual fuere su razón de no emplearlas yo se lo voy a aclarar:
Mire señor Ríos; la primera acepción de escándalo que nos da el diccionario de la Real Academia Española es negativa: "Acción o palabra que es causa de que alguien obre mal o piense mal de otra persona". La segunda no es mejor: "alboroto, tumulto, ruido". Ni la tercera: "desenfreno, desvergüenza, mal ejemplo". ¿A qué podemos referirnos cuando, después de presenciar un partido, se habla de jugar de escándalo? ¿A jugar mal, como hooligans o depravados? ¡Qué va! Normalmente se utiliza, y usted si es mi seguro lector, que lo es, me habrá leído emplearla en la cuarta y última acepción de la palabra “escándalo": "asombro, pasmo, admiración". Es cierto, tomando esta acepción, que nuestro Efesé ha jugado esta noche y durante toda la temporada de escándalo, maravillando a todos de escándalo y escandalizando a esa maravillosa hinchada. Y, de paso, a la rival.
Si para algo sirve hoy el fútbol, además de para endeudar a los clubs y entrar en leyes concursales, es para provocar escándalos. En la cuarta acepción del término, claro. De escándalo fue el partido y resultado, 4-1, contra el Murcia hace dos temporadas; escandalizados salimos del Cartagonova con el arbitraje de Teixeira Vitienes en el partido jugado en el Cartagonova aquel 22 de mayo contra el Levante; escandalosa fue la temporada 2009-201 realizada por Juan Ignacio Martínez; escándalo "supercalifragilístico espialidoso" fue la contratación de un ayudante de campo llamado Ángel Quirantes, en Mayo de 2011; fracaso escandaloso el fichaje de 17 jugadores para completar la que decían era una descuajaringada plantilla; escandalosa ha sido y está siendo esta temporada; de escándalo se comportó un justiciero, llamado Pino Zamorano, aquella noche que suspendió el partido cuando un avión papiroflexiado aterrizó en el cráneo, escaso de amplitud de pista, de su línea; escandaloso ha sido el partido de esta noche y super escandaloso ha sido el descenso a 2ª B que, matemáticamente, ya está cerrado y. escándalo tras escándalo, es lo que los aficionados, simpatizantes y abonados podría añadir a continuación de éstos...
Mi memoria de espectador futbolístico de campo es larga y remota. Está poblada de partidos soporíferos, imprecisiones, penaltis fallados, pifias a puerta vacía, patadas, broncas, maletines, ególatras de manual –alguno aun pasea y paseó últimamente por el Cartagonova-, injusticias, jugadores humildes y fatuos y directivos de escándalo, pero nunca de tanta escandalera. Tanto he disfrutado escandalosamente este año que he vivido futbolísticamente revolcado en el escándalo, en el asombro, en el pasmo y poco, muy poco en la admiración únicamente deseo: ¡Suerte, para mi FC Cartagena!
Francisco Gómez Hernández, presidente, único accionista de este Fútbol Club Cartagena, una vez que ha vuelto de China, debe extraerse la cera de las orejitas y arrimar el oído a la voz de la grandiosa masa social de este equipo. Sé, todos lo sabemos que ¿ésta su masa social? es y ha sido un juguete que tienen tanto él como su “gente”, que se han apropiado de ella para presumir, mentir, engañarles, caerles graciosos, ahora menos, y no resolver nada; pero esa masa social, ¡sépalo! es también pueblo soberano y gremio que se agremia alrededor del fútbol.
Ahora el gremio, ¡escandalazo de gremio este del FC Cartagena! no cesa de murmurar, cada vez más cabreado, contra ti, contra tu “gente” y contra parte de esa escandalosa plantilla que enhebraste para ascender a la Primera División. No les gustáis, cada día menos, y con razón. Ya no serán un escándalo vuestros desaciertos, es vuestra obligación si, con responsabilidad, metéis las tijeras, porque cada tijeretazo que deis será congruente, necesario, justo y no herirá a nadie, sólo a una persona si no lo hacéis: a ti. ¡Ay, ay, ay!
PD. Se me olvidaba, esta noche el FC Cartagena ha jugado en el Nuevo Arcángel. Ha jugado y ha perdido de escándalo, como casi siempre en esta temporada.
Pedro-Roberto J.P. En un “Rincón para Doce”. Dies 5/19: ante diem undecimum Kalendas Iunias. Nº 234.
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