viernes. 29.03.2024

El Icue y…fútbol sólo para adultos

Presenciando el partido contra este histórico Real Jaén, de repente me he acordado de Chesterton que, además de escribir paradojas como los ángeles, también se ocupó de los deportes al comentar que “éstos sin espíritu competitivo no emocionan”. Esta tarde, hermosatarde de abril, ha habido, entre los dos equipos que...

Presenciando el partido contra este histórico Real Jaén, de repente me he acordado de Chesterton que, además de escribir paradojas como los ángeles, también se ocupó de los deportes al comentar que “éstos sin espíritu competitivo no emocionan”.
Esta tarde, hermosatarde de abril, ha habido, entre los dos equipos que luchan por presentarse como primeros en la liguilla de ascenso, grandes dosis de emoción y enorme esfuerzo de competitividad. Y dentro de esta lucha sin tregua me he formulado estas dos preguntas que el Icue rápidamente me ha contestado. ¿Logrará el FC Cartagena mantenerse definitivamente y hasta la jornada 38 en el primer puesto de la clasificación? Salvo tsunami, me ha contestado el Icue, sí. Y, ¿cuál será el futuro del FC Cartagena? Ganar el play-off y, salvo catástrofe, volver a esa Segunda División que nunca debió abandonar.
Como ven, estimados lectores, la victoria de esta tarde nos ha dejado un Icue, soñador, amador, enaltecido, elogioso y todo un señor; como señor ha sido Pacheta honrando con emotiva y merecida ovación del Cartagonova  al cambiar a Marcos Rodríguez y Tonino. Y, volviendo a casa y tras evaluar el partido, el partidazo, de esta tarde me ha comentado, a lo bajinis “estar impresionado, también seducido, por la ciudad, el proyecto, la efesemanía y ese entrenador y sus futbolistas, que aunque les duela a los lelos, han vuelto al primer puesto que, con el average a favor, costará lo apeen de él en los seis partidos que restan. Hay que ver ¡qué ciudadano tan afable y generoso es este Icue!
¡Qué espectáculo de fútbol con sabor a play off el de esta tarde! Ahí hemos estado, observando como el Cartagonova ha sido todo un muestrario con escaparate incluido. Palco abarrotado y a reventar, cosa que el Icue hubiera querido para las gradas. Hasta Paco Gómez estuvo. Ojeadores e intermediarios como Pedro por su casa. Directores deportivos del norte, sur, del este y hasta de las Islas afortunadas. Expectación suma ante un partido de los de antes y entre dos equipos con acreditación para ser campeones. 
Hoy hemos presenciado un partido de cuando la Liga era la Liga y no un partido de patio de escuela. Recuerdo que, un encuentro como el de esta tarde, en otros tiempos, paraba la ciudad y hoy solamente han asistido 5123 espectadores. O casi.
FC Cartagena y Real Jaén nos han ofrecido un espectáculo para adultos. Fútbol del bueno. El partido del Cartagonova no ha defraudado ni a los zagalicos, que, en su ternura, imaginan el juego como una secuencia de caños, espuelas, piruetas y posturitas. Lo de hoy ha sido un choque pleno de autenticidad. Veloz. Intenso. De riesgo. Un partido de dar la cara. Sin otras interrupciones que las necesarias para recuperar fuelle. Muy a la antigua. Donde cada córner del Cartagena era un huy y cada acoso del Jaén un suspiro. Donde se peleaba por cada centímetro cuadrado de césped. Sin desmayos en las áreas. Por momentos me recordó la Liga de antaño. Y hasta la primavera quiso asomarse. El FC Cartagena fue mejor y hasta le aguantaron las fuerzas. Mereció y se fue con ventaja de dos goles al descanso. Y en la segunda parte pudo aumentar la ventaja y no se dejó engullir por los corajudos de Manolo Herrero. Es entonces cuando recordé que hubo un tiempo en el que este equipo se acostumbró a respirar el olor del almizcle, aroma mahometano, extraído del pato almizclero.
La Liga, en lo que resta, me da a la nariz que ya será monocroma. Vale, bicolor, sí blanquinegra. Luego, los cachondos, vendrán y dirán y escribirán otras cosas.  La Liga, digo, en la que el FC Cartagena es el rey y el Real Jaén el príncipe. Esta victoria ya empuja hacia arriba y Pacheta junto a los suyos no desea y, seguro, no hará alquimia con los números.
Ahí queda la última reflexión que el Icue arroja contra algunos hinchas blanquinegros  en su particular catálogo de agravios hacia ese entrenador salense venido del frío y que cada vez me recuerda más a Escipión que, en la Batalla de Baécula, una de las importantes de la Segunda Guerra Púnica, hizo que Asdrúbal perdiera el combate y huyese, llevándose, eso sí, el tesoro y los elefantes. El Icue no tiene reparo en reconocer que los de Pacheta, entre Tonino, Diego Segura y Álvaro, haciendo no sé si de Iniesta o de Messi, nos han ofrecido un partido inolvidable, en el que la efesemanía lloróde felicidad y de éxtasis a la vez. Y es que llorar es eso que hace a los seres humanos asequibles y a veces deseables.  ¡Ay,ay,ay!
Pedro-Roberto J.P. En un “Rincón para Doce”. Dies 4/7: ante diem septimum Idus Apriles. Nº 283.

http://lamedusapaca.blogspot.com.

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