Los dos se llaman Nicolás, los dos podrían jugar de pívot en cualquier equipo de baloncesto, los dos son delanteros centros, los dos son juncos futbolísticos y los dos son futbolistas de largo recorrido mundial. Uno viene del frío y el otro procede de cálido continente sudamericano. Son Nicolás Zigic (BackaTopola, Voiovodina, Serbia, septiembre de 1980)y Nicolás Raimondi (Montevideo, Uruguay, septiembre de 1984). Y, ahora, vienen unos y lo bautizan “Ibraimondi”. ¿Icue, qué tendrá que ver el culo con las témporas?
Como comprobarás, querido Icue, los dos han nacido en el mes de septiembre con una diferencia de cuatro años de juventud para el montevideano. Eso está bien. Los dos han recalado, uno antes que otro, en el fútbol español entrando por el mar, Zigic por donde azota la galerna y Raimondi por donde alumbra la cultura.
Futbolísticamente al serbio lo he visto jugar en vivo y en directo, al uruguayo sólo por televisión y en un partido. Me gustaron los dos y que yo sepa ninguno de estos dos llegó al fútbol español bajo el paraguas de eso que ahora tanto se está utilizando para hacer la promoción como el “agit – prop”. Uno llegó en los finales días del mes de agosto del 2006, el otro,como regalo de Reyes,en los primeros días del mes de enero del 2012.
Fíjate Icue que coincidencia poseen estas dos lanzas futbolísticas: ambos estuvieron protegidos por dos fieles escuderos de parecida y gran talla futbolística. Uno junto a Pedro Munitis, sí, ese que este verano se comentó pudo desembarcar en el Cartagonova. El nuestro, Nicolás Raimondi, en lugar de contentarse con un solo escudero tendrá dos y tan grandes como el Escudero español por excelencia, éstos no son otros que Ander Lafuente, otro del cantábrico y Juan José Collantes, éste de donde se abrazan el Mediterráneo y el Atlántico.
Si las coincidencias señaladas forman parte de la carta astral de los días de septiembre en el que nacieron, el 25 para el más alto y el 5 para el de Montevideo su aportación a este equipo, en el caso del “U-ru-gua-yo” debe ser tan destacada como la que formaron en el Sardineroel llamado Dúo sacapuntos. En nuestro caso “Los tres en raya” marcarán goles, provocarán penaltis, darán asistencias, lanzarán faltas al borde del área, sacarán puntos, entusiasmarán al Cartagonova y éste, exultante o silencioso, aguantará como siempre.
Intuyo, escudero Icue, que en el fútbol que se verá y contemplaremos en el Cartagonova con “Los tres en raya” nos vamos a convertir en auténticos “agit-prop” erigiéndonos en portavoces de todos los cartageneristas, en cuyo nombre siempre hablaremos.
Vamos a presenciar un gran espectáculo en cada partido. El Cartagonova ha descubierto a Raimondi y ya había destapado a Collantes y a Lafuente, dos de los pocos delanteros que, junto al uruguayo, cumplen el canon de Policleto. Si para los griegos, la belleza era y es la obrera del orden, la proporción y equilibrio para el FC Cartagena este trío, nacido hace una semana, serán esgrima de gol intentando floretear a las defensas contrarias.
Los tres, el sábado pasado, utilizaron el ataque de sable. Con sus estrategias lo colocaron en lo alto, dos Collantes y uno Raimondi de precioso cabezazo.“Soy bastante rápido para el tamaño que tengo (1,96) y no me considero torpe”.
No digamos que cualquier tiempo pasado fue mejor, el del Uruguayo siempre fue de maleta; siempre cogió el primer tren o avión que le llevara a ninguna parte, por su recorrido, hasta pudo sorprenderle la ruina siendo alto y hasta guapo, pero no sé si feliz. Recuerdo Icue, que nosotros escapábamos de casa, antes de que nos echaran, íbamos en autostop a buscar lo que saltara y aprendíamos a vivir de milagro, como los gorriones. Constato que este simpático grandullón que se vino en avión desde Montevideo a La Rambla un día de Reyes de 2012 en las pocas declaraciones que ha realizado fueron para consolidar su madurez, - “Ahora me siento más maduro. En algunos lugares me ha faltado madurez y también ha podido ser que mi señora no se ha sentido cómoda”,-ya que no es hijo de la abundancia y por lo tanto el Icue no puede aplicarle aquella máxima socrática según la cual los jóvenes son unos tiranos que contradicen a sus padres, viven a su costa y se burlan de sus maestros.“Po-sí”.
Pedro-Roberto J.P.En un “Rincón para Doce”.Dies 1/25: ante diem octavium Kalendas Februarias.
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