Por esfuerzo, suerte, ilusión e inteligencia. Sin ir más lejos, en el fútbol. Por ejemplo en el Zaragoza, que puede ser el milagro 2012 de Primera. ¿Por qué no el FC el de 2ª?
Mirando al calendario y al equipo soy ahora más optimista que Guillermo, que ya es decir. Si como decía en mi artículo anterior “Como la copa de un Pino” sumamos 6 puntos en 4 días…y ya llevamos 3, el milagro podría llegar. El equipo está en el mejor momento de la temporada y el gran Luis, el Zapatones, decía que la temporada se resuelve en los últimos 10 partidos. Los cinco primeros fueron injustamente sin resultados pero jugando de tú a tú a los de arriba y los cinco últimos son contra equipos que no se juegan nada, por lo que apretarán poco salvo maletines no previsibles.
Goiría, que lo mejor que hizo fue irse, dijo que en Cartagena hay mucho pesimismo. Vean si no la locura destructiva que nos arrasa : faltando muchos partidos dieron al equipo por descendido igual que al Zaragoza como deshauciado (a Manolo Jiménez, su entrenador, sólo le faltó llorar amargamente en las ruedas de prensa), “desmantelaron” el equipo : uno quería irse, el otro ya tenía equipo y exigía garantías para el cobro, el de más allá disponía de ofertas y, naturalmente ya estaban preparando el equipo para 2ª B porque, es lógico, desde primeros de junio al 31 de agosto no habrá tiempo…¡Dios!.
Ya vieron las prisas del futbolísticamente maldito Quirantes lo que nos ha traído…¿Por qué no esperar al descenso matemático, si se produce, y entonces plantear todas estas cosas que ahora parecen barbaridades?...
Esperen, esperen, por si somos el milagro de 2ª –el Celta tiene la primera palabra- y después hablamos.
La realidad es que no fue justo no haber sacado más puntos en los últimos partidos desde aquel del Murcia en la Condomina. ¿Por qué no va a cambiar la suerte?
En el baloncesto no es que puede haber milagros, es que ha habido uno y gordo el domingo en Madrid. Desde 1967 el Estudiantes, cuando empezó de verdad el baloncesto, este equipo era de élite, el de mejor cantera de la historia suministrando cada año al Real Madrid lo mejor, equipo puro de baloncesto como el Juventud, no sucursales del equipo de fútbol como Real Madrid, Barcelona y otros muchos.
Mantiene equipos a porrillo de los estudiantes del Instituto Ramiro de Maeztu de Madrid y cae generalmente simpático menos a los del Bernabeu con los que su hinchada –de las más fieles y numerosas de España- se mete mucho. Bueno, las dos Españas de siempre, tan de actualidad en estos difíciles momentos para nuestra nación.
Se la juegan a un solo partido en su campo frente a un Murcia que no ha hecho historia (todavía) en este deporte, hay 13.250 espectadores a su favor frente a unos 220 del UCAM ataviados de rojo y colocados en el gallinero, en el “cielo”, para que no molestasen, aunque se dejaron oir. Ahí no estuvo nada elegante el equipo estudiantil.
Pues bien, David vence a Goliat y los árbitros, a los que tanto critico, actúan impecablemente y triunfa la pureza del deporte. Milagro. ¿Porque no hubo presión de una Demencia y un Pabellón de Deportes algo ligth?
Estuve allí , con mi hijo Álvaro, exjugador y con una temporada de juvenil en el Estudiantes, para empaparme del ambiente. Gritos de “Murcia ACB, Murcia ACB” y mi hijo, que es un cachondo, decía que podían añadir “y el CT a 2ª B”, que rimaba, pero hicieron solamente lo que debían: animar a los suyos. Milagro: árbitros sin influir y buenísimo perder de la hinchada derrotada, sin malos gestos, ni actos extraños, sino callados, resignados y jodidos, con la cabeza gacha volviendo a sus casas, que ya llegará el año próximo y las cosas serán diferentes en el mundo y en la ACB.
Y tienen razón los que decían que en CT no vendimos nunca nuestro derecho ACB. En mi entusiasmo siempre pensé que nuestra ciudad debe estar mucho más arriba, pero la realidad es que entonces, hace ya unos cuantos añitos, el equipo estaba en Primera División, la siguiente categoría a la ACB y se llamaba Proexinca CB Cartagena y no tenía un duro, porque supongo que en la temporada 89-90 no habría llegado el timo del euro a nuestras vidas.
Ayudaban al equipo la alcaldía con su representante del Partido Cantonal, Antonio Vallejo, y la empresa Carrefour, que ofreció ayuda económica a través del Ayuntamiento. Cambia la alcaldía y llega el socialista José Antonio Alonso que dice al Director Técnico que sí, que lo inscriba para una nueva temporada, pero muchas promesas y ningún dinero... Mientras, el Caja de Ronda, que era el equipo de Málaga, se fusiona con Mayoral Maristas y…busca una licencia para Melilla. Baloncesto imposible sin dinero, hay que vender la plaza y nos quedamos sin segundo escalón del basket.
Me lo ha contado el responsable de aquel tiempo y el que hizo la operación, Alfonso Martínez Zamora, que por cierto pasa por un mal momento de salud y hay que apoyarle. Se perdió este deporte como el voleibol, que iba lanzado, como el Polaris fútbol sala que era, en dinero, un Real Madrid de la época, pero que –las cosas de Cartagena- no ganó nada. Ahora vegetamos en la Liga EBA de baloncesto, categoría que está detrás de la ACB y de la LEB. He leído que un equipo de Murcia impidió la semana pasada otro de Cartagena la posibilidad de ser campeón.
Esta temporada cayó el Reale Fútbol Sala, descendió a Regional el histórico FC, el Esperanza… y la mar de penas, pero la 2ª División todavía está ahí.
La Demencia del Estudiantes colocó el domingo una pancarta, que decía : “Con los que ganan es muy fácil”. Estar con ellos, por supuesto, lo difícil es lo contrario. Menos mal que nosotros contamos con una gran afición, que sigue sin desmayar. Lo de la entrada contra el Numancia no es tan importante: mala hora, peor tiempo con lluvia, televisado en directo (le hemos caído en gracia a Marca TV) y una previsible derrota que nos podía mandar al hoyo. Mejor no verlo, pero hubo bastantes que sí lo hicieron.
Y llegó la victoria, con la bendita afición. Por lo que se puede decir una semana más : CT sí, CT siempre.
