27 de abril de 2011, 2:00
En ella Platón explica su teoría de cómo con conocimiento podemos captar la existencia de los dos mundos: el mundo sensible (conocido a través de los sentidos) y el mundo inteligible (sólo alcanzable mediante el uso exclusivo de la razón). Si trasladamos esta misma alegoría a la etapa actual de la historia, vemos que poca ha discernido desde entonces.
Haciendo un símil, la situación por la que atraviesa el FC Cartagena se divide en dos mundos; por un lado el sensible, en el que cada uno expresa sus sentimientos, sus actitudes hacia el equipo, su rabia y desilusión por la mala racha que durante estas últimas jornadas ha cosechado el conjunto albinegro, ofreciendo una imagen fuera de casa muy distinta a la que estábamos acostumbrados a ver en el Estadio Cartagonova. Y por otra parte, el mundo inteligible, solo alcanzable mediante la razón, en la que las sombras de la caverna se entremezclan no dejando paso a una realidad e ilusión que muchos todavía albergan para su equipo.
Es por ello, que ahora más que nunca el apoyo incondicional hacia el equipo debe hacerse notar, dejando atrás esas sombras del mundo sensible y dando paso a la razón. El calendario es propicio para el FC Cartagena, seis puntos, dos partidos, dos victorias seguidas, darían la oportunidad y el desahogo de jugar la liguilla de ascenso y aspirar a compartir “mesa y mantel” con equipos de Primera.
Haciendo un símil, la situación por la que atraviesa el FC Cartagena se divide en dos mundos; por un lado el sensible, en el que cada uno expresa sus sentimientos, sus actitudes hacia el equipo, su rabia y desilusión por la mala racha que durante estas últimas jornadas ha cosechado el conjunto albinegro, ofreciendo una imagen fuera de casa muy distinta a la que estábamos acostumbrados a ver en el Estadio Cartagonova. Y por otra parte, el mundo inteligible, solo alcanzable mediante la razón, en la que las sombras de la caverna se entremezclan no dejando paso a una realidad e ilusión que muchos todavía albergan para su equipo.
Es por ello, que ahora más que nunca el apoyo incondicional hacia el equipo debe hacerse notar, dejando atrás esas sombras del mundo sensible y dando paso a la razón. El calendario es propicio para el FC Cartagena, seis puntos, dos partidos, dos victorias seguidas, darían la oportunidad y el desahogo de jugar la liguilla de ascenso y aspirar a compartir “mesa y mantel” con equipos de Primera.
